“Fuencaliente no tendrá asfalto ni para el día de Reyes”

Los vecinos de Fuencaliente, los empresarios turísticos del sur de la Isla, los comerciantes y los agricultores de la zona, además del propio Ayuntamiento sureño, se encomiendan estos días a un acto de fe a la espera de ver cómo y en qué fecha, se inicia el asfaltado de la precaria carretera de Fuencaliente, por la que llevan esperando desde 2015, cuando se cumplió el plazo de ejecución de la obra.

“Fuencaliente no tendrá asfalto ni para el día de Reyes”. Así lo augura el teniente alcalde de la localidad, Luis Torres, que asiste entre confuso y asombrado al anuncio que, desde Coalición Canaria en el Gobierno regional, se hace del inminente asfaltado de la carretera de Fuencaliente, un incumplimiento reiterado y con prejuicios económicos “importantes”, que les ha llevado a enviar reiteradas cartas, pedir reuniones y realizar peticiones de apoyo al Cabildo, todo ello en un plazo de dos años, con especial agravamiento de las quejas, desde el pasado mes de mayo.

Para entender el retraso de la obra y el aislamiento que sufren los vecinos de Fuencaliente, hay que retrotraerse al momento de la adjuciación de la obra, en mayo de 2011, cuando el Gobierno de Canarias asignó a través de concurso público a UTE constituida por Sacyr – Trayesa – Los Volcanes – Herquipalma, por un importe un 25% más bajo que el importe de licitación.

Superado en dos años y medio el plazo de ejecución de la obra, establecido en 48 meses, la UTE ha intentado sin éxito la apertura de su propia planta de asfalto, todo ello, reconocen fuentes autorizadas del propio ayuntamiento, del Cabildo y hasta desde la propia Consejería de Obras Públicas del Gobierno de Canarias, tras negarse a comprar el asfalto a la única planta de asfalto operativa en la Isla, aduciendo una supuesta situación de ilegalidad de esa entidad, instalada en Fuencaliente desde hace casi tres décadas.

El informe solicitado a la Consejería de Industria por parte de Obras Públicas, para verificar la imposibilidad de comprar asfalto a Lusan, ha terminado desmontando los argumentos acusatorios de la UTE de Fuencaliente. Desde el Ayuntamiento advierten ahora de que, a la vista de las circunstancias actuales, y una vez desmontado el argumento que con el que se “justificaba” no asfaltar la única vía de acceso al sur de la Isla, disponen de “datos fiables” que indican que “la UTE no puede pagar más que 53 euros por tonelada de asfalto, porque sino tendrán perdidas económicas”.

Los fuencalenteros esperan ver ahora, cómo se cumple el anuncio de Coalición Canaria, que se ha felicitado del anuncio realizado días atrás por el consejero de Obras Públicas, de que en los próximos meses se iniciarán los trabajos de asfaltado de los 7 kilómetros que discurren entre Fuencaliente y El Charco de la carretera LP-2, en el tramo entre Bajamar y Tajuya. Los trabajos, han asegurado los nacionalistas en un comunicado, “se han programado tras ratificar la Consejería que la planta de aglomerado asfáltico necesaria para desarrollarlos cumple con las competencias de seguridad industrial, tal y como informó la  Dirección General de Industria y Energía”.

Eso sí, todas las partes implicadas en que la carretera del sur,  nuevo ejemplo de retraso en las obras viarias de La Palma, es de gran importancia para el desarrollo de la Isla, al ser uno de sus principales ejes viarios.