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Aznar, en exclusiva para el DIARIO: “Temo por el futuro de España”

El expresidente del Gobierno confirma a DIARIO DE AVISOS que participará activamente en la campaña electoral del PP "para ayudar" en aquello que esté en su mano. "Hay que salvar el régimen constitucional", subraya
ENTREVISTA JOSE MARIA AZNAR DA
ENTREVISTA JOSE MARIA AZNAR DA
José María Aznar y Antonio Salazar, director de La Gaveta Económica, durante la entrevista. / DA

José María Aznar ha venido a Canarias para la presentación de su libro, El futuro es hoy (Editorial Península, 2018), en un acto organizado por La Gaveta Económica. Con la presencia de uno de sus colaboradores más estrechos en las Islas, José Manuel Soria, disertaron durante más de una hora sobre los enormes desafíos que vive el mundo -brexit, Europa en la vía muerta, repliegue de Estados Unidos, guerra comercial, expansión de los populismos y crisis institucional-, deteniéndose en lo que ocurre en España, que vive “el mayor desafío de los últimos años con el golpe de Estado de Cataluña”. Tras concluir su participación, accedió a mantener una entrevista en exclusiva con DIARIO DE AVISOS.

-A su juicio, ¿qué está en juego el próximo 28 de abril?

“Nos estamos jugando la pervivencia de nuestro sistema constitucional, de la transición democrática del 78 y nos jugamos la continuidad histórica de España. Es, por tanto, una elección trascendental que tiene un carácter existencial para el país”.

-En su libro habla de la ruptura del consenso constitucional, pero defiende la idea de que tal fue la excepción, no la regla, que nuestra historia no es de acuerdos y sí de disensos. ¿Se puede volver al consenso?

“Del consenso se salieron los nacionalistas y se ha salido este PSOE que lidera Pedro Sánchez. No se puede volver al consenso constitucional si no se produce un cambio sustancial, tanto en la izquierda como en el nacionalismo. Para que se pueda producir es inevitable, y deseable, la victoria del centroderecha. Si no ocurre, si prevalece un partido que hoy no se puede considerar un defensor del régimen constitucional junto a otros cuyo objetivo es acabar con ese régimen, la ruptura estará garantizada. Una responsabilidad que cabe atribuir a los nacionalistas y a la izquierda, que son los que rompen ese consenso en el año 2004, que ha ido agigantándose hasta alcanzar su forma actual con el golpe de Estado producido en Cataluña.”

-Pero el PSOE no tiene una visión uniforme de esto, parece que existe incluso cierta contradicción interna. Algunos dirigentes son muy críticos con las cesiones a los independentistas. ¿No cree que puedan restablecerse esos puentes rotos?

“Dependerá de la evolución del Partido Socialista, pero cuando un partido pacta con los secesionistas, negocia temas que inciden en la estabilidad constitucional, en la unidad de España o la prevalencia o no del Estado de derecho, entonces es un partido al que ya no se le puede considerar una fuerza constitucional; por eso digo que su candidato, Pedro Sánchez, es un candidato de la secesión, un candidato secesionista al que hay que combatir”.

-Lo plantea en términos históricos, pero la verdad es que uno no sabe si el propio concepto se ha ido devaluando. Ahora casi cualquier cosa es histórica, sin quitar importancia, claro está, a lo que ocurre.

“Es que la historia está plena de esos momentos, lo que ocurre es que no todos tienen ese carácter trascendental, germinal o existencial, pero este sí. Nos jugamos el régimen constitucional en estas elecciones y esto puede significar que quede en entredicho desde la monarquía hasta la continuidad histórica de España. Es una inmensa irresponsabilidad haber llegado hasta aquí. Cada generación tiene sus responsabilidades y debe saberlas afrontar, las de hoy se deben meditar y apelo a su capacidad para entender lo que nos estamos jugando como sociedad”.

-En el libro reconoce los errores cometidos por ese pacto del 78. Probablemente, dice, la corrupción, el oportunismo y el ensimismamiento corporativo han minado la fe de la ciudadanía. Sin embargo, cree igualmente que las soluciones a los problemas actuales solo se pueden hacer bajo su amparo, que la constitución del 78 sigue siendo igualmente válida…

“Lo más urgente para recuperar el vigor de la Constitución del 78 es desarticular el golpe de Estado, esto pasa por asegurar la primacía de la Carta Magna, de la ley y el orden en Cataluña con todas sus consecuencias. Pasa también por respetar las sentencias del Tribunal Supremo. Si, por el contrario, se puede vulnerar la ley impunemente en Cataluña, no prevalece la ley ni el Estado de Derecho se respeta, el orden constitucional acaba rompiéndose. Si, además, prometen indultos a los golpistas, estos acaban ganando. Las alianzas de los golpistas con el actual Partido Socialista terminarán acabando con el régimen constitucional”.

-La campaña va a estar centrada en el asunto de Cataluña, como si no existiesen otros desafíos, particularmente económicos…

“Es que está centrada, se quiera o no, porque ese el problema de España, hay otros países que tienen otros problemas. Francia tiene uno de radicalismo, en el Reino Unido es el brexit, en Italia centran sus problemas en las cuestiones inmigratorias y el populismo. España tiene el problema de Cataluña, las demás son cuestiones importantes, pero complementarias. Sin abordar esa cuestión será difícil resolver otras. A España, coincido, le vendría muy bien una buena reforma fiscal; una buena reforma educativa; seguir y mejorar la reforma laboral; le vendría muy bien una reforma del sistema de pensiones; le vendrían muy bien medidas para reducir el déficit y la deuda pública; le vendría muy bien tener claro en qué medida nos va a afectar el desarrollo de la inteligencia artificial…, pero si a usted le dan un golpe de Estado y no lo resuelve, no se puede dedicar a estas cosas. Lo primero es el elemento básico en el que debemos concentrarnos y esto lo tienen claro las fuerzas que representan el centroderecha. Pero por eso también apelo a la concentración del voto en el PP para evitar que el candidato de la secesión, que supondría una posibilidad alta de ruptura de España, pueda vencer”.

-En el año 2004, cuando usted voluntariamente abandona, hay un solo partido de centroderecha. Quince años después hay tres que compiten por ese electorado. En un análisis, quizás de brocha gorda, en buena parte por el abandono de su sucesor de los valores e ideas que habían hecho reconocible al PP, al tiempo que machacaba a impuestos a los eventuales apoyos. Pablo Casado preside el PP intentado a un tiempo, reenamorar a los antiguos votantes sin perder a los fieles. ¿Le dará tiempo?

“Hay que intentarlo todos los minutos del día. Casado recibe un partido con un ADN que se había difuminado y un legado donde el espacio político está fraccionado en tres. Es una situación verdaderamente difícil, como le dije en la última convención del partido, la más complicada que haya tenido que afrontar ningún dirigente del PP. Pero es la que hay, hay que afrontarla. Yo no estaría hoy aquí, claramente lo digo, si no supiera que Pablo Casado es la recuperación del ADN del PP, es una garantía desde el punto de vista político. Lo estoy porque lo sé, el PP ha recuperado el ADN, está dispuesto a dar las batallas por las ideas y, encima, las puede ganar. Los tiempos son los que son, en 1989 fui candidato en unas condiciones muy complicadas porque se convocaban elecciones en un momento en que el PP no tenía líder. Nos presentamos, se pudieron salvar los muebles y ahí empezó la expansión del PP. Él tiene que actuar con enorme decisión y valentía, pero tiene capacidad y determinación para hacerlo”.

-El problema es que usted tuvo más oportunidades antes de ganar las elecciones. Saliendo de un congreso con tres candidatos, si no consigue un buen resultado o formar gobierno, es previsible que se produzcan disensiones internas en su partido. ¿Teme por el futuro del PP?

“Temo por el futuro de España, creo que esto es más importante”

-Ha apelado en ocasiones a la refundación del centroderecha, una unión entre las fuerzas que compiten por el mismo electorado. ¿La ve posible hoy?

“Ahora lo que hace falta es concentrar el voto en el centroderecha. En el PP, hay que conseguir que Pablo Casado sea el próximo presidente del Gobierno y salvar el régimen constitucional en España. Luego ya se verá lo que pueda pasar, pero no es lo mismo un voto a unos que a otros. Se tiene que agrupar en torno al candidato del PP. Estaré en campaña en algunos actos para ayudar en aquello que esté en mi mano”.

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