el charco hondo

Papá, ¿por qué somos del Atleti?

Esta repentina vocación de diálogo, ese sobrevenido afán de explorar puntos de encuentro, buscar acuerdos e incluso pactar (proclamados con solemnidad este fin de semana por Ciudadanos y el PP) ha sido unánimemente contestada en bares, cafeterías y otros termómetros electorales con una pregunta doble, ¿ahora?, ¿y por qué ahora y no antes? Interrogantes que la mayoría, según asomó en las conversaciones el anuncio de Rivera o Casado, no quiso dejar sin rematar, venga ya, a buenas horas, a quién van a engañar, se han pasado meses sin mover un músculo y ahora, con las elecciones ya convocadas, evangelizan que han visto la luz (posiblemente en la absurda expectativa de que a pie de calle aplaudiríamos a rabiar), y que sí, ahora sí. No es creíble. No cuela porque va contra sus propios actos; pero, sobre todo, porque si los actores, el país, la coyuntura y las banderas son las mismas piezas que en verano, ¿cómo es que no se abrieron al acuerdo en mayo, junio, julio o agosto? Los sondeos cuentan a unos y otros que la gente penaliza a los protagonistas directos o indirectos del bloqueo, de ahí que Casado o Rivera digan lo que la gente quiere oír. Hacen trampa. Han colocado un titular que la letra pequeña desmiente (anuncian como algo lo que no deja ser nada de nada). Si tan fácil era intentarlo, ¿por qué no nos ahorraron unas elecciones que condenan al país a perder otro año? Nos han preguntado mil veces qué pensamos, otra mil se lo hemos dicho, ¿para qué vuelven a preguntarnos lo mismo? No son pocos los que anuncian que no van a votar, y lo argumentan, sí, cuántas veces van a preguntarme lo mismo, ya saben lo que pienso, no voy a repetírselo cada seis meses, ya están bien, el problema son ellos, no nosotros. Con los socialistas temiéndose que no les va a ir tan bonito como creían, el pactismo que les ha entrado a PP o Ciudadanos lejos de generar empatía lo que ha conseguido es incendiar aún más el cabreo; pero mientras al PP no le resta, a Ciudadanos lo caricaturiza. Hace años el Atlético de Madrid lanzó un spot en el que un niño preguntaba a su padre, papá, ¿por qué somos del Atleti? Algo así estarán preguntando a sus padres los hijos de quienes alguna vez han votado a Ciudadanos.

TE PUEDE INTERESAR