El Boletín Oficial del Estado publicó ayer una ley que obliga a llevar las mascarillas en cualquier espacio público, sin tener en cuenta la distancia entre personas.
O sea, que el cubrebocas será obligatorio siempre, incluido cuando se toma el sol en la playa (en el caso de las nudistas tampoco se librarán de la prenda).
La medida ha generado tal desconcierto en algunas comunidades, que la portavoz del Gobierno, MARÍA JESÚS MONTERO anunció que la medida se someterá hoy a una revisión en el Consejo Interterritorial por si es necesaria una “matización”.
Por lo demás, sigue la polémica con la vacuna de AstraZeneca. Sanidad permitirá el antídoto anglosueco a los mayores de 65 años solo si son trabajadores esenciales, mientras que Alemania restringirá su uso a menores de 60. Y la OMS continúa investigando el origen de la COVID. Sigue pensando que procede de algún animal, pero no cierra la puerta a que el virus escapara de un laboratorio.
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