El jurado de Mineápolis (EEUU) ha encontrado culpable a Derek Chauvin, el policía que acabó con la vida de George Floyd poniéndole la rodilla en el cuello mientras intentaba arrestarlo en mayo de 2020.
La Fiscalía del estado de Minesota y la defensa de Chauvin expusieron sus versiones finales durante unas cuatro horas este pasado lunes frente a este jurado.
El juez, Peter Cahill, recordó a los miembros del jurado la necesaria unanimidad de su veredicto y les pidió que lo basen únicamente en las pruebas presentadas en el juicio. “Deben ser absolutamente justos”, les dijo Cahill.
Ocho minutos de agonía y siete días de rabia
Y les reclamó, así, que no se dejen llevar por los prejuicios ni que la opinión pública influya en su decisión.
Con los miembros del jurado ya fuera del tribunal, el abogado defensor, Eric Nelson, pidió un “juicio nulo” por “mala conducta procesal”, pero Cahill denegó la petición.
Tensión en la calle
La tensión fuera del juzgado se ha dejado notar en las calles de Mineápolis en los últimos días, sitiada por la presencia de miles de soldados de la Guardia Nacional estadounidense y otros cuerpos de seguridad.
Las autoridades estadounidenses temen que la tensión de dentro del juzgado se traslade a las calles de muchas ciudades de EEUU, por lo que se han preparado para hacer frente a una eventual ola de protestas o manifestaciones en el país una vez que se conozca la sentencia.
La portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, confirmó en rueda de prensa que el Gobierno federal se mantiene en contacto con alcaldes de las principales ciudades y con gobernadores para hacer frente a lo que pueda pasar una vez que se conozca el fallo. El objetivo, dijo Psaki, es asegurar que haya espacio para las protestas pacíficas.
“Este país ha pasado por un largo periodo, sobre todo para la comunidad negra, de dolor y agotamiento”, no sólo por este juicio sino también por la “violencia adicional” registrada en las últimas semanas, dijo la portavoz de Biden.