
Luis Miguel Ramis, entrenador del CD Tenerife, compareció en la tradicional conferencia de prensa telemática previa al choque que disputa su equipo mañana domingo ante el Cartagena. El representativo aborda una semana exigente de partidos, porque el próximo miércoles, en partido aplazado, se mide al CD Mirandés. Tras el encuentro de Anduva, los blanquiazules volverán a la isla para preparar el encuentro con el CD Castellón. “Las 42 jornadas son clave. Es una semana de tres partidos que nos pueden dar un impulso definitivo para sumar puntos y seguir creciendo en la clasificación. Tenemos tres partidos en una semana y la participación de todos será muy importante. Manejamos todas las situaciones y posibilidades”.
A Ramis no le preocupa especialmente las bajas con las que cuenta en el mediocentro, ya que no podrá contar ni con el sancionado Aitor Sanz ni con el lesionado Ramón Folch. “No es un quebradero de cabeza, porque sé que iban a llegar este tipo de obstáculos. Hay menos apercibidos, pero se seguirán produciendo este tipo de molestias. Valoraremos hoy sábado cómo llegan, pero la plantilla y jugadores están preparados”.
El entrenador blanquiazul valoró a un Cartagena que llega apremiado a este envite ante los blanquiazules. “Más que lo técnico-táctico, prima lo emocional. A nivel ofensivo, cuenta con enormes recursos y te exigen muchísimo, por lo que debemos responder a ese ímpetu con una respuesta. Eso sabemos que será así durante los 90 minutos. No debemos desaprovechar oportunidades porque nos jugamos mucho. Nuestra afición quiere ver partidos buenos, y el equipo necesita dar ese impulso fuera de casa”.
Avanzan las semanas y se sigue sin concretar que pasará con el futuro más inmediato del entrenador tarraconense. “No tengo fechas límite. Estamos en una semana intensa. Hasta final de temporada, tenemos tiempo para decidir en cualquier circunstancia. No hemos tenido conversaciones a ese respecto, centrados principalmente en esta semana. Nuestra cabeza y la del cuerpo técnico están al cien por ciento con el equipo. Tener o no contrato más allá de junio no cambiaría mi implicación. Estamos al 150%. Antepongo el bienestar del club, luchando por hacer las cosas bien y sacar puntos para sacar adelante dicha situación. Podríamos haberlo hecho mejor, pero también peor. Nos dejamos la vida para que todos los jugadores sigan motivados. Todo esto exigente un nivel de responsabilidad e implicación máxima, más allá de las responsabilidades individuales”.