El Ayuntamiento de Adeje ha abierto el período de información pública, durante un plazo de 15 días, después de que se aprobara en sesión plenaria iniciar los trámites para expropiar la Casa Fuerte de Adeje, un inmueble catalogado como Bien de Interés Cultural (BIC) en 1986 y que presenta un estado “ruinoso” en pleno casco urbano de municipio sureño.
En este tiempo, los titulares de bienes y derechos afectados pueden aportar por escrito “cuantos datos permitan la rectificación de los posibles errores que se estimen en la relación publicada u oponerse a la ocupación o disposición de los bienes y derechos por motivos de forma o fondo”, tal como se especifica en el Boletín Oficial de la Provincia de Santa Cruz de Tenerife.
En la comunicación oficial se indica que la valoración del inmueble es de 1.179. 377 euros y que ésta es “única” al tratarse de una edificación “única”, tanto a nivel urbanístico como por la propia naturaleza del inmueble.
Hay que recodar que el informe técnico alertaba de la necesidad de una actuación urgente “antes de que el daño sea irreversible” y detallaba numerosos desperfectos, entre ellos el derrumbe de muros, la caída de tejados, el deterioro de piedras o la desaparición de esgrafiados e idolillos de gran valor histórico y artístico.
El Consistorio adejero justifica el expediente de expropiación ante el estado de ruina del inmueble, que achaca tanto al paso del tiempo como al abandono actual por parte de los propietarios, además de las acciones de expolio, actos de destrucción sistemática y grafitis.
La administración local ha recurrido a la expropiación forzosa recogida en la Ley de 16 de diciembre de 1954, tras haber realizado durante décadas, recuerda, numerosas gestiones para intentar llegar a un acuerdo amistoso con las diferentes partes propietarias que han heredado el inmueble. Sin embargo, fuentes municipales confirmaron que todos los esfuerzos han sido infructuosos y ha sido imposible alcanzar un acuerdo unánime.
La Casa Fuerte fue construida en 1556 por solicitud de Pedro de Ponte y Vergara, regidor perpetuo de Tenerife, y se convirtió durante tres siglos en el centro político, económico y social de la jurisdicción de Adeje. El edificio, protegido por un castillo para defenderse de las amenazas piratas, ocupa una superficie de 7.200 metros cuadrados.