En lo que va de año el crimen organizado en la Costa del Sol estaba operando con un perfil bajo, y sólo se habían cometido dos ajustes de cuentas bastantes discretos sin causar pánico a la población. Pero las mafias internacionales de vez en cuando advierten que su presencia aquí no es testimonial. El tiroteo en la discoteca de Marbella es la mejor prueba de ello.
Un ciudadano holandésde unos 40 años abrió fuego este lunes de madrugada con un arma corta en la zona VIP de la discoteca Opium Marbella tras ser apuñalado, causando 4 heridos de bala. Todas las víctimas son extranjeras (un hombre y una mujer irlandeses están en la Unidad de Cuidados Intensivos). El tirador también se encuentra hospitalizado por heridas con arma blanca en frente, cuello, espalda y ojo.
La Policía Nacional también ha detenido a una segunda persona en relación con los hechos. Se trata de un joven holandés de 26 años que acudió a la fiesta con el tirador. Antes de comenzar el tiroteo se observa en un vídeo como una persona toma un objeto de la bandolera de un conocido. No se puede apreciar si es el cuchillo o la pistola.
La paz se rompió pasada la una de la madrugada por causas que se desconocen, seguramente por alguna nimiedad entre estos dos grupos de los reservados. Estaba actuando anoche el famosísimo disc jockey sudafricano Black Coffee, y todas las entradas se habían vendido. Una conocida influencer en el Reino Unido y Países Bajos estuvo allí y ha compartido en Instagram un vídeo donde se ve a la gente entrar en pánico. Todos corrieron cómo pudieron a un lugar seguro.
Si bien en otros lugares los narcotraficantes son más discretos, en Marbella en verano no se comportan así. Alguien que sea observador puede reconocer fácilmente en la zona VIP de una discoteca a un grupo narcos, y a ellos tampoco les importa mucho ser reconocidos. Ayer se pudo ver a un par de convoyes de coches de alta gama con matrícula holandesa por la zona de Marbella porque muchos capos tienen sus escoltas.
El tiroteo en la discoteca de Marbella no es algo habitual
Que haya alguna reyerta con algún susto puede ser habitual, pero que alguien dispare en una discoteca causando varios heridos de bala son varios peldaños por encima en el nivel de violencia habitual. En 2020 miembros de una conocida banda motera dieron una paliza a un portero de la NAO Pool también en Marbella. Los equipos de seguridad de los locales de ocio están advertidos de que a qué se pueden enfrentar. Conocen a ese tipo de cliente problemático si lleva mucho efectivo, buenos relojes, y bandoleras de marcas de lujo.
Si hay un lugar en el mundo donde te pueden decir “no sabes quién soy” y ser una persona realmente peligrosa ese sitio es Marbella. Anoche estaba siendo tranquila y estos tristes hechos sucedieron en un evento que reúne a mucho tipo de gente, desde el sobrino del Rey a un miembro del crimen organizado holandés. La entrada para la actuación costaba 30 euros, pero un reservado sin bebidas para estar lo más cerca posible del DJ ascendía a 3.000 euros.
Los dos grupos responsables de la reyerta estaban sentados en uno de estos lugares que rodean al artista principal, y tuvieron que pagar 3.000 euros por cinco asientos sin bebida. Luego habría que añadirle las botellas que consumían mientras la fiesta seguía, y se puede observar en las imágenes de los testigos de lo sucedido que estaban bebiendo varias botellas de vodka que oscilan entre 1.200 a 2.200 euros cada una. A pesar del desembolso nocturno no pretendían pasarlo bien, ya que este tipo de grupos criminales funcionan con otros códigos. Una simple mala mirada puede provocar algo así.
La pregunta a resolver sería: ¿por qué va una persona acude armada con una pistola a un reservado de una discoteca en Marbella? Si algún criminal porta un arma en Marbella en un lugar público es porque teme ser atacado. Este tipo de persona vive un miedo constante por los peligros que engloba formar parte de esas importantes mafias internacionales.