Los cuerpos sin vida de un bebé y su padre fueron hallados el pasado 15 de febrero en un apartamento de Nueva York, Estados Unidos.
Según indica el informe forense, el menor murió de hambre unos días después que su progenitor, que falleció por causas naturales.
“Se cree que el Sr. Conde falleció primero y el niño no pudo obtener ningún alimento después de la muerte de su padre”, señala la Oficina del Sheriff del Condado de Ontario en un comunicado.
Familiares de las víctimas alertaron de la desaparición del padre y su hijo tras no recibir noticias suyas en al menos una semana. Esto propició que la Policía se desplazara al domicilio, encontrando allí los cuerpos.