Los opositores a Policía Local de La Laguna jamás se imaginaron que el proceso, cuyas primeras bases fueron publicadas en el año 2019, acarreara tal cantidad de modificaciones e imprevistos. Un cambio en la composición del tribunal dio paso a un nuevo camino para los aspirantes a agentes que, por aquel entonces, desconocían el insólito procedimiento en el que se verían envueltos.
“Existen bastantes irregularidades”, declara a DIARIO DE AVISOS la defensa del primer afectado que, tras diversas reclamaciones, quiso iniciar una demanda por vía judicial, a quien se le denegó audiencia a la hora de solicitar la revisión de uno de los ejercicios que conforma la oposición. “Cada postulante tiene derecho a que se le conteste de manera individualizada, así como entender por qué se le ha dado una calificación concreta”, explica la abogada, quien puntualiza que otra persona que guarda cierta relación con un policía en activo recibió la audiencia pertinente.
A pesar de que el denunciante busca la nulidad del proceso, este ha seguido adelante con la prueba de idiomas, cuyas calificaciones ya han sido incluso publicadas. Y es que, al parecer, este examen tampoco ha sido del todo transparente: “Quisieron presentarse opositores que no habían formalizado la solicitud desde un primer momento. Algo que recogen las bases y, por ende, la Ley. Sin embargo, desde el Ayuntamiento de La Laguna modificaron los requisitos y comunicaron a través de una mera nota de prensa, ni siquiera en un formato legal, que todo el que quisiera podría realizar dicho examen”.
Se trata de un ejercicio voluntario al que se presentaron “sin tener derecho” un total de 22 aspirantes. Sin embargo, el auténtico quid de la cuestión, tal y como indica la parte demandante, radica en el contraste tan drástico entre las notas del práctico y este último, que tiene como propósito ayudar a los participantes a incrementar su calificación final: “Hubo gente que pasó de un suspenso a un 10. Por ello, pienso que a algunas personas que no tenían muy buenas puntuaciones se les facilitó realizar esta prueba, pese a no haber presentado solicitud, para garantizarles una plaza en el cuerpo policial”.
Desde el consistorio lagunero alegan supuestos problemas técnicos a la hora de llevar a cabo la petición, pero “mi cliente no tuvo ningún impedimento en obtener el documento”. “La Fiscalía Anticorrupción debería hacerse eco de lo que está ocurriendo en este proceso”, agrega.
La persona presuntamente afectada ha presentado un contencioso-administrativo que busca anular la oposición. Su defensa afirma con rotundidad que “los responsables tendrán que indemnizar a mi cliente por todo lo que haya podido percibir”. Asimismo, reconoce que “como jurista, estoy abrumada” porque “jamás me había topado con un procedimiento tan irregular”.
Ayuntamiento de La Laguna
Por su parte, desde el Ayuntamiento de La Laguna manifiestan que “el trámite de audiencia no se produce porque el examen es anónimo y las solicitudes no pueden realizarse rompiendo la cadena de anonimato”. Asimismo, precisan que el tribunal, compuesto por cinco miembros -dos de ellos pertenecientes al Consistorio y el resto ajenos a la citada administración-, “no puede conocer quiénes son las personas que concurren a los ejercicios”.
“Las solicitudes de audiencia se realizaron de forma genérica, sin concretar los motivos por los que se pedía una revisión ni a qué examen se refería, o se reclamaba la subida de calificación sin más”, sostienen.
En alusión al examen de idiomas, concretamente al de inglés, “los criterios de evaluación fueron publicados sin que se presentara ninguna reclamación. Se descartó que la prueba fuera oral ante la posibilidad de poder interpretarse que no tenía cabida en las bases”.
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