La pasada semana Cecilio Hernández, de 85 años, lanzaba un mensaje de auxilio. Candelaria, su mujer, de 82, enferma de alzhéimer necesitaba una residencia de mayores en Santa Cruz de Tenerife en la que pudieran atenderla tras llevar 11 años esperando por una plaza.
Este tinerfeño tiene una pensión de 630 euros y este mes tuvo que pagar 300 para pagar el alquiler de la vivienda. Además, por cuestiones burocráticas, su mujer no pudo cobrar la pequeña pensión contributiva que le corresponde. Según contó a Televisión Canaria, el cansancio hacía mella en él.
“Me acostaba llorando, no cenaba, preguntándome por qué nos ha tocado esto… Pensé en quitarme la vida, lo digo claro, porque me veo impotente. Necesito una residencia donde pueda ir”, indicó a las cámaras reconociendo lo desesperado de su situación.
Solución para Cecilio y su mujer
Hoy, Ponte al día, programa de Televisión Canaria, desvelaba que Candelaria ingresará en los próximos días en una residencia de mayores en Santa Cruz de Tenerife.
“Yo la quiero más ahora que antes, porque me necesita. Yo sufro mucho, aunque no se vea, pero a mi edad hago todo por ella”, decía Cecilio visiblemente emocionado.
Con esta solución, tanto Cecilio como Candelaria aspiran a una vida mejor, en la que ella vea sus necesidades cubiertas, con la atención que, por su enfermedad, merece.