El tirón de población que ha experimentado el sur de Tenerife en los últimos años, con niveles de crecimiento por encima del resto de la Isla, tendrá reflejo en las próximas elecciones del 28 de mayo.
El aumento del número de residentes empadronados en los cuatro años últimos en la comarca provocará que tres municipios, Granadilla de Abona, San Miguel de Abona y Güímar, amplíen el número de concejales que conformarán sus corporaciones municipales.
En el caso de Granadilla de Abona, que ha superado ampliamente los 50.000 habitantes, el número de ediles aumentará de los 21 actuales a 25, por lo que la mayoría absoluta se situará en 13 concejales, mientras que San Miguel de Abona y Güímar, tras rebasar los 20.000 residentes, incrementarán sus asientos en los salones de plenos de 17 a 21, lo que elevará el listón de la mayoría absoluta hasta los 11 ediles.
La Ley del Régimen Electoral General es la encargada de establecer la composición de los ayuntamientos en función del número de habitantes de cada municipio, tomando como base los datos oficiales del último padrón publicado por el Instituto Nacional de Estadística (INE) en 2022. Así, la ley establece que en aquellas localidades con una población censada de entre 50.000 y 100.000 habitantes, como es el caso de Granadilla de Abona, se elegirán 25 concejales (cuatro más que en la actualidad), mientras que las que cuenten entre 20.000 y 50.000, como ocurre en San Miguel de Abona y Güímar, se designarán 21 ediles (también cuatro más).
A los tres casos de Tenerife, hay que sumar el municipio de Mogán, en el sur de Gran Canaria, que incorporará en las elecciones del próximo 28 de mayo a cuatro ediles más, hasta alcanzar la cifra de 21 al superar la barrera de los 20.000 habitantes empadronados.
El mayor número de concejales se elegirá en Las Palmas de Gran Canaria (29), mientras que en Santa Cruz de Tenerife, La Laguna y Telde se designarán 27. Betancuria, en Fuerteventura, será el municipio con menor representación (7).