El Área Insular de Patrimonio Histórico considera que el proyecto para dotar de sombra la calle Castillo afecta de forma negativa a este tramo del Conjunto Histórico del Antiguo Santa Cruz, por lo que su valoración inicial sobre este proyecto impulsado por el Ayuntamiento capitalino es desfavorable. Sin embargo, a pesar de esta conclusión, invita al Consistorio a ejecutar un ensayo, a modo de “proyecto piloto”, en un tramo de la vía, el comprendido entre Valentín Sanz y Teobaldo Power, para confirmar, o no, su impresión inicial tras el análisis del proyecto, justificando esta decisión en que las infografías que lo acompañan pudieran generar una imagen falseada del resultado final. Por eso, le concede al Ayuntamiento una autorización condicionada para la colocación de los toldos en este tramo, aunque deja claro que si la prueba “confirma la valoración inicial y se estima que los resultados no son los deseados en relación a la preservación de los valores patrimoniales del conjunto histórico, se procederá a la retirada inmediata de los elementos instalados en el plazo de tres semanas”.
Desde el Ayuntamiento de Santa Cruz, el concejal de Urbanismo y responsable del Distrito Centro-Ifara que impulsa este proyecto, Guillermo Díaz Guerra, mostraba su perplejidad ante la fórmula elegida por el Cabildo para, en la práctica, obligarlos a rehacer el proyecto. “Nos están pidiendo una prueba para ver cómo queda, y si no les gusta, los tenemos que quitar. Y entonces, ¿qué le digo al proveedor?, ¿qué hago luego con los toldos? Es absurdo”, lamentaba el edil, que no dudó en criticar al Cabildo en este área, al afirmar que “en momentos como este es cuando pienso que el Cabildo sobra cuando opina sobre Santa Cruz. Hay que cambiar la ley de Patrimonio o restringir sus funciones a las de apoyo a los municipios que verdaderamente lo necesiten”. A pesar de todo, el edil avanza que consultará con Intervención para ver si se puede hacer una prueba, como pide el Cabildo.
inconveniente
El principal inconveniente del Área Insular de Patrimonio Histórico, según puede leerse en el informe que ya ha sido enviado al Ayuntamiento, tiene que ver con la localización de la malla, que se coloca entre la planta baja y la primera planta de los diferentes inmuebles en cada sector: “Esta ubicación trae consigo la ocultación parcial de los edificios que delimitan la calle, entre ellos los que poseen un interés patrimonial singular”. Según el Cabildo, “las alturas superiores de los edificios se visualizan con mayor claridad en el ancho de la calle, que perdería su perspectiva, y no sólo de abajo a arriba”.
Así, “se podría producir, por tanto, una drástica reducción de la percepción de elementos significativos del Conjunto Histórico en los periodos de instalación de la malla, lo que repercutiría negativamente en la propia imagen histórica del Conjunto”.
El informe incluso sugiere que si los toldos fueran colocados en lo alto de los edificios, como se ha hecho en otras ciudades, ese inconveniente se podría ver resuelto, así como que las telas deberían ser más ligeras. También consideran que la instalación, tal y como está prevista, supone “la pérdida del punto de fuga y la visión del mar desde la parte alta de la calle Castillo en dirección este”.
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