La Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) ha desestimado el recurso de apelación contra una sentencia de la Audiencia Provincial de Santa Cruz de Tenerife que condena a un hombre 23 años de cárcel tras matar a puñaladas al novio de su exmujer en Granadilla.
La sentencia, hecha pública este martes, recoge que los hechos se produjeron el 11 de marzo de 2020 cuando el asesino se presentó en las instalaciones de la empresa en la que trabajaba la víctima y de forma sorpresiva le atacó con un cuchillo de 20 centímetros de hoja y le asestó varias puñaladas.
Para asegurarse de que cometería los hechos el hombre concertó una cita a través de una tercera persona y en un horario en el que sabía que no habría nadie en la tienda.
El hombre no podrá acercarse a su exesposa, su hija y las del asesinado y deberá indemnizarles con la cantidad que se determine en el momento en el que la sentencia sea firme en caso de que recurra ante el Tribunal Supremo (TS).
La Sala descarta que en el ataque no hubiera ensañamiento, como ha apelado la defensa, que advertía de que las cuchilladas se realizaron en la misma zona para provocar una muerte rápida, dado que el asesino asestó varias puñaladas a la víctima y tenía intención de “causar sufrimiento y dolor”, con un ataque “brutal” y una “agonía prolongada”, y todo “por simples celos”.