Los representantes sindicales de los trabajadores del tranvía y la empresa Metropolitano de Tenerife llegaron ayer a un acuerdo con el que se ha puesto fin al conflicto laboral y la huelga que existía en el tranvía desde el pasado mes de febrero, y en cuyas negociaciones terminó intermediando el Cabildo para avanzar en el proceso de diálogo y lograr una resolución.
El acuerdo alcanzado ayer contempla, entre sus puntos más destacados, un compromiso para abordar la sustitución de la arena de sílice en el sistema de frenado del tranvía, una sustancia que se considera cancerígena y cuyo uso los sindicatos han estado denunciado, y el incremento de la plantilla, con nuevos conductores.
El acuerdo, firmado por las tres organizaciones sindicales representantes de los trabajadores, Metropolitano y responsables del Cabildo, será ratificado mañana por la asamblea de los trabajadores.
El presidente del Cabildo en funciones, Pedro Martín, calificó de “muy buena noticia” el acuerdo alcanzado y agradeció “la implicación y disponibilidad de la plantilla de trabajadores y el buen trabajo del gerente y el equipo de Metropolitano, que, junto con la aportación del personal del Cabildo, han aunado esfuerzos para buscar puntos de encuentro y zanjar la huelga”, que se había prolongado “mucho en el tiempo y era necesario reconducir esta situación definitivamente”, apuntó.
Mientras, Juan Miguel Suárez, secretario de Acción Sindical de FSC-CC.OO., destacó que el acuerdo se ha alcanzado “en el tiempo de descuento”, ya que era el último día antes de la nueva legislatura, y que lograrlo “ha sido muy complicado, han sido cuatro meses de negociaciones”.
El acuerdo establece, según se detalló CC.OO., en materia de seguridad laboral, la redacción del texto de reglamento del funcionamiento interno del comité de seguridad y salud, así como del protocolo de prevención y actuación frente a la violencia, acoso laboral, sexual o por razón de género y del reglamento de funcionamiento interno de la comisión de igualdad.
Asimismo, se acuerda la realización de nuevas mediciones de exposición a la arena de sílice, con aprobación de los tiempos de trabajo con polvo y concesión del tiempo de higiene requerido, adopción de las medidas preventivas ante exposiciones accidentales e implantación de las mejoras técnicas para la limpieza de residuos. De la misma forma, se hará un seguimiento del estudio encargado a Alstom para estudiar la viabilidad de otras sustancias alternativas a la arena de sílice y, una vez se verifique, se empezará sin dilación las gestiones para su sustitución a la mayor inmediatez.
En materia laboral, respecto al servicio de conducción, “la conciliación de la vida laboral y familiar con la dinámica del servicio que había planteada era imposible” y en el acuerdo se ha logrado establecer “una jornada de siete horas y media pero con cuatro horas continuadas de trabajo”, explicó Juan Miguel Suárez.
Esto conlleva también que se acuerda proponer al Consejo de Administración de Metropolitano el incremento de la plantilla de conductores en seis nuevas plazas y, de continuar la gratuidad de servicio, se sumarán dos más, entre otros muchos más puntos del acuerdo.
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