El hotel de Añaza, o lo que pudo ser y no fue, será, por fin, demolido próximamente. Es cierto que han pasado muchos años desde que, tras quedar en ruinas, se busca una solución aunque, ahora sí, podría tener sus días contados. Pero lo que para los tinerfeños y tinerfeñas podría es algo ya casi habitual, que forma parte del paisaje, fuera de las Islas se trata de un lugar llamativo.
En muchas de las guías de viajes de lugares abandonados o de misterio, el hotel de Añaza ocupa un lugar importante. Desde hace más de 40 su esqueleto está ahí, suponiendo, además, un peligro para muchas personas que se han colado dentro de él.
Cuatro muertes en el hotel de Añaza
Los vecinos de la zona denunciaron durante años el peligro que suponía el libre acceso al edificio en ruinas, donde ya han muerto al menos cuatro personas. The Sun, recogiendo un reportaje del blog 91 Days Travel hace especial hincapié en este aspecto, tildándolo de “lugar espeluznante”.
La historia de este edificio se remonta al año 1973, cuando una empresa alemana compró la parcela que entonces pertenecía al municipio de El Rosario. Allí, muy cerca del mar, en un abrir y cerrar de ojos se levantaron 21 pisos de altura, destinados a lo que iban a ser apartamentos de tiempo compartido (time sharing). Con la misma rapidez que aparecieron y construyeron, apenas un año después, los promotores alemanes desaparecieron y hasta la fecha siguen sin ser localizados.
Para los británicos que visitaron las ruinas se trata de un sitio, además de espeluznante, “muy misterioso” destacando que en el lugar se encuentran “colchones y otros enseres” que nunca pertenecieron al hotel, que quedó en proyecto, sino de personas que pernoctaron o vivieron en el edificio.
Solo dos empresas se han presentado a la licitación para redactar el proyecto de demolición de las ruinas del hotel de Añaza. El plazo finalizó el pasado 18 de abril, y según confirman desde la Gerencia Municipal de Urbanismo de Santa Cruz, son dos las ofertas que se han registrado. Se trata de una licitación con la que se fijarán las bases de un derribo para el que un estudio previo fijó un coste de 3,1 millones.
Una vez recibidas las ofertas, ahora deberá convocarse la primera mesa de contratación en la que se comprobará que las empresas que se han presentado cumplen con todos los requisitos y han entregado la documentación correspondiente, para, a continuación proceder a la valoración de las ofertas. El presupuesto base de licitación, impuestos incluidos, es de 131.000 euros, y el plazo para redactar el proyecto es de cinco meses.
Será entonces cuando el “misterioso hotel de Añaza” que nunca fue tal pase a la historia, desapareciendo de guías alternativas de viaje en los que se quiere visitar lugares misteriosos o abandonados.
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