Limitar la vivienda vacacional en el casco histórico del Puerto de la Cruz a los 220 inmuebles catalogados, reorganizar la circulación viaria ganando más espacio para el peatón y apostar por una ciudad sostenible que tenga en cuenta la demanda actual de aparcamientos. Estos son los tres ejes fundamentales sobre los que se sustenta el Plan Especial de Protección del Conjunto Histórico (Pepch) del municipio.
El documento, elaborado por la empresa pública Gesplan, fue dado a conocer ayer en rueda de prensa y por la tarde recibió el visto bueno inicial del Pleno, pero solo con los votos de los concejales del Gobierno (PSOE y Asamblea Ciudadana Portuense). Los dos grupos de la oposición, Partido Popular (PP) y Coalición Canaria (CC), votaron en contra al considerar que faltaban informes, lo que puede cuestionar su legalidad, y ante la negativa del Gobierno de dejarlo sobre la mesa.
A partir de ahora se abre un periodo de alegaciones de 45 días para que la ciudadanía pueda presentar sus propuestas y sugerencias al documento, cuya documentación se encuentra disponible en el portal web.
El Pepch parte de la base que la protección del patrimonio debe convertirse “en la seña de identidad y el motor de la revitalización de la ciudad”, según declaró la coordinadora del equipo redactor, Mónica Socas. Por esta razón ha incorporado las propuestas de ordenación contenidas en diferentes instrumentos urbanísticos que actualmente se encuentran en tramitación, como pueden ser la modificación del Plan de Modernización, el segundo Plan de Modernización, el Plan de Movilidad Urbana Sostenible y la remodelación de determinadas carreteras.
Asimismo, se eleva a la máxima potencia la flexibilidad en los inmuebles catalogados permitiendo, indistintamente, los usos residenciales, turísticos, los servicios terciarios, recreativos y equipamiento, como un incentivo a los propietarios para su rehabilitación y puesta en uso siempre que sean respetuosos con sus valores patrimoniales.
El concejal de Ciudad Sostenible, David Hernández, precisó algunas de las actuaciones que se pondrán en marcha para conseguir los objetivos del Pepch. Así, confirmó que se peatonalizará un tramo de la calle San Felipe, las vías interiores de La Ranilla y toda la calle Perdomo, dado que gran parte del casco ya está peatonalizado. Ello supondrá la eliminación de plazas de aparcamiento, aunque no concretó el número exacto, pero se mantendrán las destinadas a movilidad reducida.
Respecto a esto último, el documento contempla un balance entre la pérdida de plazas y la demanda existente entre los residentes en el casco histórico, dado que se prevén nuevos parkings en la plaza de la Constitución, calle José Arroyo y en el edificio de la antigua estación de guaguas, entre otras localizaciones. En el caso de las viviendas con plazas de garage, Hernández garantizó que los propietarios seguirán teniendo acceso a las mismas.
Una de las principales novedades del documento es que añade tres nuevos catálogos, como es el caso del conjunto etnográfico, conformado por 38 cruces localizadas en las fachadas de los inmuebles del casco que, si bien no presentan valores individualmente, responden a una tradición cultural arraigada en la ciudad como es el caso del enrame de cruces.
El otro catálogo nuevo es el inmaterial, constituido por manifestaciones culturales que se desarrollan en esta zona, como es el caso de la embarcación de la Virgen del Carmen, el mataculebra y el baño de las cabras. Por último, se añade el de árboles monumentales y flora singular, conformado por 16 especies que engloban 476 árboles en el centro del municipio.