El Departamento de Seguridad Nacional ha confirmado que la actividad del volcán de La Palma ha crecido en las últimas horas, provocando una nueva colada de lava. La nueva lengua de lava ya desciende camino hacia el mar, donde podría llegar próximamente. De esta forma, aumentaría la cantidad de gases tóxicos que se respira actualmente en la isla. De momento, no se han realizado más evacuaciones, aunque no se descarta que haya que hacerlo en las próximas horas si la lava avanza por zonas que hasta ahora no lo había hecho.
El vicepresidente y consejero insular de Agricultura, Ganadería y Pesca, José Adrián Hernández Montoya, ha asegurado que este viernes se podrá acceder, siempre que las circunstancias lo permitan, a regar y cortar fruta al norte de la montaña de La Laguna, en Tazacorte, así como en las zonas de El Remo, Charco Verde, Puerto Naos y Las Hoyas.
La nube de gases mantiene el delta de lava del volcán de La Palma oculto a un lado, pero desde el otro extremo deja ver esta extensión que en las último día ha crecido diez hectáreas superando ya las 17. Desde el acantilado le ha arrebatado casi 500 metros al mar y del agua sobresale con una altura de 24 metros y la transformación de la isla no se detiene. Lo que antes era una línea recta de costa ahora tiene esta protuberancia volcánica, que sigue expandiéndose al ritmo que la lava se precipita sobre ella.