Un equipo de científicos de la Universidad de Montreal en Canadá ha realizado un descubrimiento fascinante en relación a un planeta gaseoso ubicado en las afueras de nuestro sistema solar. Se trata de WASP-76b, un gigante gaseoso situado a una distancia de 634 años luz de la Tierra. Este planeta presenta condiciones extremas, con un clima cálido que puede llegar a alcanzar temperaturas de hasta 2 mil grados centígrados.
Uno de los aspectos más interesantes de WASP-76b es la presencia de lluvias de hierro líquido debido a su ambiente extremadamente caliente. Sin embargo, lo que ha sorprendido a los científicos son los nuevos elementos encontrados en su atmósfera. Hasta el momento se han identificado al menos 11 elementos distintos, como hierro, calcio, hidrógeno, magnesio, nitrógeno y vanadio, que normalmente se encuentran en planetas similares al nuestro.
«Verdaderamente raros son los momentos en que un exoplaneta a cientos de años luz de distancia puede enseñarnos algo que de otro modo probablemente sería imposible saber sobre nuestro propio Sistema Solar» dijo Stefan Pelletier líder del equipo internacional de astrónomos en un nuevo estudio del planeta, par el medio británico Daily Star.
Estos nuevos elementos hallados en WASP-76b han llevado a los científicos a considerar la posibilidad de que este planeta haya «devorado» a otros en el pasado. La presencia de estos elementos con valores diferentes a los previamente registrados sugiere que podría haber absorbido materiales de otros planetas en su entorno.
Mohamad Ali-Dib, astrofísico de la Universidad de Nueva York Abu Dhabi, ha señalado la importancia de este estudio, ya que es la primera vez que se logra medir con precisión la abundancia de elementos químicos como el níquel, el magnesio y el cromo en un planeta gigante.
Estos planetas gigantes, que suelen orbitar muy cerca de sus estrellas, han sido denominados como «Júpiter calientes» debido a su tamaño y características. En el caso específico de WASP-76b, se estima que tiene aproximadamente el 90% de la masa de Júpiter, pero su radio abarca alrededor del 185% del tamaño de este famoso planeta.
«Las desviaciones de sus valores de lo que se espera nos llevaron a postular que WASP-76b podría haberse tragado otro planeta mucho más pequeño, uno con la misma composición química de Mercurio», afirmó el científico.
El descubrimiento de nuevos elementos en la atmósfera de WASP-76b es un avance significativo en nuestra comprensión de los planetas gaseosos y su formación. A medida que los científicos continúen investigando y analizando los datos recopilados, es posible que obtengamos más información sobre la evolución y características únicas de estos fascinantes mundos lejanos.