El sector de la aviación en España y particularmente en Canarias llora la pérdida de uno de los suyos, Miguel Torrens, conocido como Miguelo, quien falleció en la noche de ayer martes, de forma repentina, según indica la cuenta en Facebook de Controladores Aéreos Españoles.
Torrens dedicó más de 40 años a su profesión y, si bien estaba jubilado desde 2013, conservaba el cariño de sus compañeros que hoy se confiesan “abatidos por la triste noticia” y quienes le definen como “una persona entrañable y queridísima por todos quienes tuvimos la fortuna de conocerle”. Sin más, se despiden de ‘Miguelo’ con bonito mensaje: “Allá donde estés llevarás alegría”.
Tal y como indica el periódico especializado en turismo, Tourinews, Miguelo comenzó su trayectoria profesional en 1971 en el Aeropuerto de Tenerife Norte.
Pronto destacó hasta convertirse en uno de los controladores más importantes en el aeródromo lagunero, aunque también dejó su huella en el Centro de Control de Tránsito Aéreo de Canarias, en Gran Canaria.
Y precisamente desde esta isla vivió la tragedia que tuvo lugar en el aeropuerto de Los Rodeos, en marzo de 1977, considerado, más de cuatro décadas después, como el accidente aéreo con mayor número de víctimas mortales (583) de la historia de la aviación comercial.