Esta semana un grupo de investigadores de la Universidad de Edimburgo (Escocia) ha secuenciado una nueva variante del coronarivus, denominada científicamente como B.1.525, que incluye varias de las mutaciones más preocupantes, alguna de ellas capaces de combatir los anticuerpos del cuerpo humano.
De esta última cepa hallada se han detectado dos mutaciones situadas en la proteína S, la que utiliza el virus para infectar a las células. Estas mutaciones se han denominado Nelly (N501Y) y Erik (E484K). La primera se asocia a una mayor capacidad en la transmisión de la Covid, mientras que la segunda se relaciona con una disminución del efecto de los anticuerpos, entre los que se incluye el efecto de las vacunas.
Esta variante B.1.525 no se ha detectado solo en Reino Unido, sino que estaría ya presente en una decena de países, entre los que se encuentra España, según el informe de los científicos británicos.
El listado de países donde se ha detectado la temida variantes está formado por Dinamarca (35 casos), Reino Unido (33), Nigeria (12, y de donde provienen los genomas del virus), Estados Unidos (10), Francia (5), Ghana (4), Canadá (3), Australia (2), Jordania (2), Bélgica (1) y España (1). La secuenciación de esta variante en territorio español está fechada el 25 de enero.