La emblemática misión espacial de la NASA, Voyager 1, lanzada en septiembre de 1977, continúa asombrándonos mientras se aventura en el vasto y enigmático espacio profundo. Conocida por portar uno de los famosos Discos de Oro que contienen sonidos terrestres y desafiando las fronteras del Sistema Solar, la Voyager 1 ha sido un pilar en la exploración espacial desde hace más de cuatro décadas.
La primera nave espacial que abandonó nuestra heliosfera, la Voyager 1, es una nave espacial legendaria. Ahora, después de 46 años, empieza a mostrar su edad. Según la NASA, un fallo en el sistema de datos de vuelo (FDS) de la nave espacial está provocando que la Voyager 1 envíe de vuelta una serie repetida de unos y ceros en lugar de datos científicos y de ingeniería.
Sin embargo, en los últimos días, la NASA ha anunciado un problema técnico que podría poner fin a la fase científica de esta histórica misión. La Voyager 1 se encuentra a 24 mil millones de kilómetros de la Tierra, casi 11 veces la distancia entre nuestro planeta y el Sol. A esta distancia épica, la comunicación con la sonda espacial es un desafío monumental, ya que los comandos tardan casi un día completo en llegar a su destino.
El problema en cuestión radica en el sistema de datos de vuelo (FDS) de la Voyager 1, que ha dejado de transmitir datos científicos e información de ingeniería a la Tierra. La causa de este fallo técnico se encuentra en un subsistema llamado Unidad de Modulación de Telemetría (TMU), que debería enviar un solo paquete de datos a la Tierra a medida que el FDS recopila información. Sin embargo, en lugar de cumplir con su función, la TMU está transmitiendo un «patrón repetitivo de unos y ceros como si estuviera atascada», según la NASA.
Una misión de la NASA llena de misterio
La agencia espacial está trabajando incansablemente para resolver este problema, pero la naturaleza de la misión Voyager plantea desafíos únicos. Para abordar este dilema, el equipo de la Voyager 1 se ve obligado a recurrir a documentos de décadas de antigüedad escritos por ingenieros que nunca anticiparon los problemas tecnológicos actuales. Esto añade una capa adicional de complejidad a la búsqueda de soluciones, ya que cada nuevo comando debe ser minuciosamente evaluado para evitar consecuencias no deseadas en una nave que se encuentra en el extremo del Sistema Solar.
El equipo de la Voyager está trabajando actualmente para solucionar el problema, pero su distancia de 15 mil millones de millas y su tecnología obsoleta significan que es probable que se demoren semanas en encontrar una solución, si es que llega.
Este no es el primer obstáculo que la Voyager 1 ha enfrentado en su prolongada travesía. En el verano, la NASA perdió temporalmente contacto con su gemela, la Voyager 2, debido a un error humano que alejó su antena de la Tierra, perturbando la comunicación con la sonda. Además, en 2022, la Voyager 1 experimentó una falla en su sistema de control y articulación de actitud (AACS), lo que generó confusión en la transmisión de datos de telemetría. Resolver este problema llevó varios meses de esfuerzo y dedicación por parte de los ingenieros de la NASA.
La NASA no pierde la esperanza con la misión espacial
A pesar de estos desafíos, la NASA tiene la esperanza de mantener ambas naves espaciales operativas hasta al menos 2025, con la posibilidad de continuar enviando datos de ingeniería utilizando la Red de Espacio Profundo (DSN), una red internacional de antenas de radio. Si todo sale según lo planeado, el DSN podría seguir comunicándose con la Voyager 1 y su gemela durante gran parte de la década de 2030 aun que la NASA ha suspendido varias misiones importantes durante los próximos años.
La longevidad y el éxito de la misión Voyager 1 y Voyager 2 han superado con creces las expectativas iniciales, convirtiéndolas en las naves espaciales en funcionamiento más antiguas de la historia de la exploración espacial. A medida que continúan su travesía a través del espacio interestelar, es probable que aún experimenten momentos cruciales que nos sorprenderán y nos recordarán el asombroso alcance de la exploración humana en el universo desconocido. Estaremos atentos a cualquier desarrollo futuro en esta emocionante historia espacial.