Un bebé de solo cinco meses falleció tras ser atropellado por una camioneta en Auckland (Nueva Zelanda).
Al parecer, el pequeño se encontraba en su cochecito, que salió a la carretera al no tener accionado el freno de seguridad.
Según la versión que dio el conductor al New Zealand Herald, el carrito «salió de la nada».
Por su parte, la madre del bebé, reconoció que olvidó accionar el freno de seguridad del carrito en el que se encontraba su hijo, por lo que este salió rodando cuesta abajo.
El conductor, «destrozado»
El conductor confesó al citado medio que está destrozado: «No puedo dormir, no puedo conducir, no puedo hacer nada. No lo puedo creer. Realmente lo siento por el bebé y la familia. Es una pesadilla».
Pese a los esfuerzos de los médicos que le atendieron, el niño fue declarado muerto horas después del incidente.