España es un destino cada vez más atractivo para las inversiones inmobiliarias. De acuerdo con el último estudio de la empresa británica 1st Move International, especializada en mudanzas y reubicaciones, nuestro país se encuentra entre los más buscados a nivel mundial para comprar inmuebles.
Este creciente interés abre un abanico de oportunidades que los inversores deben conocer a la hora de hacer una Inversión Inmobiliaria en España, un país que ha visto cómo en los últimos años la economía ha crecido de forma sostenible y estable (situándose como la que más crece en Europa). Este crecimiento, a su vez, ha ido unido a una reducción de la tasa de desempleo y a una confianza cada vez mayor por parte de los inversores en el mercado.
Sin embargo, a la hora de invertir en bienes raíces, no es oro todo lo que reluce. Por ello, hay que tener en cuenta una serie de factores a la hora de invertir en un inmueble. Y, ¿qué factores son los que se deben considerar para que una inversión inmobiliaria en España sea exitosa?
Uno de los primeros puntos a analizar y que todo inversor debe tener en cuenta es el de escoger el tipo de inmueble que mejor se ajuste a tus objetivos. Las viviendas, los locales comerciales y las oficinas tienen diferentes perfiles de rentabilidad que deben evaluarse detenidamente. En este puntos, nos encontramos con la siguiente situación en función del segmento:
- Viviendas: Las viviendas son uno de los tipos de inmuebles más populares para la inversión inmobiliaria en España. Pueden ser adquiridas para alquilar a particulares o para vender a corto plazo.
- Locales comerciales y oficinas: Los locales comerciales y oficinas son otro tipo de inmueble que puede ser adecuado y que, al igual que las viviendas, pueden dedicarse al alquiler para empresas o para vender a corto plazo. En los últimos años, además, los locales comerciales se están transformando en vivienda para ponerlas en el mercado del alquiler (tanto de larga duración como turístico) o para la venta.
Por otro lado, también hay que tener en cuenta que la ubicación es esencial. La demanda de la zona, el potencial de apreciación y la rentabilidad futura son elementos cruciales a la hora de tomar una decisión. Pero la calidad de la construcción y la sostenibilidad del inmueble también deben tenerse en cuenta, ya que tienen una incidencia directa en los costes de mantenimiento a largo plazo.
Una vez que tenemos decidido el bien inmueble, llega la parte más burocrática y, tal vez, más importante. La de cerciorarse del estado del bien inmueble. En concreto, los inversores tienen la necesidad de investigar el inmueble seleccionado, saldar deudas previas (en caso de tenerlas) y, con todos estos datos, calcular si el inmueble es el adecuado para realizar una inversión inmobiliaria. Antes de la compra, por supuesto, hay que estudiar a fondo el inmueble en cuestión y estar informado sobre los aspectos legales y fiscales.
Por otro lado, si se opta por la promoción de vivienda de obra nueva permite participar desde el inicio en el desarrollo de un proyecto y, normalmente, goza de una mayor rentabilidad.
No obstante, cada vez son más interesantes las opciones donde la rehabilitación y reforma de inmuebles para su posterior venta o alquiler. Estas soluciones ofrecen oportunidades de revalorización muy importantes.
Además, no nos podemos olvidar que también es interesante la posibilidad de invertir en suelo y terrenos, lo que puede abrir la puerta a futuras promociones. En un momento como el actual donde el suelo escasea, hacerse con un terreno a buen precio puede ser una magnífica inversión inmobiliaria en España.
La financiación y los incentivos fiscales son otros factores clave que no debemos dejar pasar. En este sentido, conocer las diferentes opciones de préstamos, hipotecas y desgravaciones puede marcar la diferencia en la viabilidad de un proyecto de inversión inmobiliaria. En concreto, los inversores deberán fijarse si es posible llevar a cabo una deducción de impuestos sobre la renta o una exención de impuestos sobre la transmisión de bienes inmuebles.
Proceso de inversión inmobiliaria
Una vez identificada la oportunidad, el proceso de inversión inmobiliaria en España comienza con la constitución de una sociedad que permita estructurar y organizar la participación de los inversores. El siguiente paso es la ejecución y desarrollo del proyecto, para finalmente llegar a la venta y distribución de los beneficios.
No hay duda de que invertir en el mercado inmobiliario español es una buena opción en estos momentos. La llegada de fondos de inversión a España en este sector dan fe de ello. Sin embargo, hay oportunidades para los particulares y las pequeñas empresas que tengan buen ojo. Las ventajas de invertir en bienes raíces en el estado español son múltiples, algo que se apoya en la estabilidad del sector, las expectativas de crecimiento y la posibilidad de diversificar la cartera de activos son algunos de sus principales atractivos. Pero, para obtener el máximo rendimiento, es fundamental contar con el asesoramiento de expertos que guíen al inversor en cada etapa.
Si has visto algo interesante, no dejes pasar la oportunidad. España ofrece un entorno propicio para que las inversiones inmobiliarias sean un éxito.