Desde que estallara la pandemia, el coronavirus ha hecho estragos en la economía de la Unión Europea y, realmente, en la economía de todo el mundo, que sin duda va a necesitar mucho tiempo para recuperarse.
Es un hecho que el coronavirus ha destruido la economía en Europa y ha disparado el desempleo, dejando un continente que está mayoritariamente estancado, económicamente hablando, debido principalmente a las diferentes restricciones impuestas por los gobiernos de los países para tratar de combatir al virus.
Y lo cierto es que los efectos de esta situación comienzan a ser palpables y en la gran mayoría de países europeos la situación económica es dramática, ya que hasta las principales potencias como Alemania, Reino Unido o Francia están pasando uno de los peores momentos que se recuerdan.
La realidad es que desde el pasado mes de marzo de 2020, cientos de miles de personas se han quedado sin empleo, debido a que muchas empresas se han visto obligadas a echar el cierre, con el correspondiente despido de sus trabajadores, y en el mejor de los casos, tan solo han sufrido un descenso en la economía, estando acogidas a ERTES y otras medidas para tratar de pasar este bache.
El euro es fuertemente golpeado en el FOREX por el retraso de las vacunas
Por otro lado, hay que destacar la fuerte caída que ha sufrido el euro en el Forex debido principalmente al retraso de las vacunas, así como a las consecuencias de los confinamientos que se están llevando a cabo en todos los países para limitar la propagación del virus, los cuales están dañando duramente la actividad empresarial, llevando las acciones a la baja.
España, una de las economías europeas más dañadas por el coronavirus
Y dentro de toda esta situación, nuestro país es uno de los que más sufre, y es que la economía española es una de las más dañadas de toda Europa por el coronavirus.
La situación es terrible, registrando una caída del producto interior bruto(PIB) del 18,5% en el segundo trimestre de 2020, lo que supone una caída de hasta seis puntos superior a la media de la zona euro, que registró una caída media del 12,8%, y de casi siete puntos que los países que forman la Unión Europea, que de media cayeron un 11,7%.
Esta es la mayor caída que se recuerda desde el año 1995, tal y como confirmó la Eurostat (Oficina de Estadística Comunitaria). Y esto también sirve para la economía de la Europa de los Veintisiete.
A medida que la pandemia avanza, la caída de la economía es mayor, ya que durante los tres primeros meses de 2020, la contracción de la eurozona había sido del 3,6%, mientras que en la Unión Europea la caída se mantenía en el 3,2%.
Y en el caso de nuestro país, la caída de la economía española casi cuadruplica a la de otros países, seguida de cerca por la caída de Hungría (14,5%) y Portugal (13,9%).
Lituania e Irlanda, las economías menos golpeadas
Por el contrario, llama la atención que las economías de Lituania e Irlanda han sido las menos golpeadas por el coronavirus, con una caída ligeramente superior al 2% del PIB de cada país, que está muy lejos de batir las peores cifras registradas.
Ante esta situación, tanto Lituania como Irlanda están muy bien posicionadas para recuperar los niveles anteriores a la crisis económica del coronavirus, y los expertos aseguran que podrían alcanzar estos niveles a mitad de 2021. Sin duda, una quimera para los países de Europa del sur, entre los que se encuentra España.
Sin duda, este es un dato sorprendente, más aún si tenemos en cuenta que las economías de ambos países fueron de las más golpeadas en la crisis de 2008, dejando unas de las peores cifras de todo el continente, junto a otros países como Grecia.
Pero parece que ese fuerte revés les sirvió para aprender la lección y tomar medidas para evitar volver a sufrirla, ya que mientras la gran mayoría de países europeos se encuentran en sus peores momentos económicamente hablando, Irlanda y Lituania están sobrellevando con creces el peor ejercicio económico que se recuerda desde el fin de la Segunda Guerra Mundial.
De hecho, centrándonos en Lituania, los expertos en economía están hablando del “milagro báltico”, ya que no hay que olvidar que Lituania es un país con una población de menos de tres millones de habitantes, y una extensión inferior a la de Castilla La Mancha, por ejemplo.
La clave del éxito ha estado en que sus principales países, como Rusia, Alemania, Letonia y Estonia han mantenido las importaciones a un buen nivel, así como que la propia Lituania apenas ha impuesto restricciones al sector industrial, lo que les ha permitido mantener su actividad, casi de forma normal.