A por una nueva Gesta

El Iberostar Tenerife dominó en Champions desde la primera jornada, firmando un torneo casi perfecto
ANDRÉS GUTIÉRREZ

Ocurra lo que ocurra en esta Final Four, la temporada 2016/2017 del Iberostar Tenerife quedará en la historia de la entidad como aquella en la que Europa volvió a conocer de cerca al equipo aurinegro.
Las proezas canaristas llegaron de Estrasburgo a Salónica y del mítico Drazen Petrovic Basketball Hall al no menos conocido Astroballe para escribir el regreso europeo del CB Canarias en letras de oro, que pueden cobrar aún más brillo a partir de mañana en el Santiago Martín.

Han sido 18 los encuentros jugados hasta el momento por el Iberostar Tenerife en la Basketball Champions League. En 13 de ellos los de Txus Vidorreta consiguieron el triunfo, cediendo solo en cuatro ocasiones y empatando un partido, ante Asvel Villeurbanne, en Lyon, que luego resultaría vital para entrar en la Final a Cuatro.

Ningún equipo pudo imponerse en sus dos partidos a Iberostar Tenerife. Strasbourg, Avellino, Oostende y PAOK ganaron a los tinerfeños un encuentro, los dos primeros en el Santiago Martín y los dos segundos en sus feudos, sin llegar a doblegar a los insulares en más de una ocasión.

DOMINADOR

La fase de grupos se tiñó de aurinegro. Los jugadores de Txus Vidorreta ganaron 11 de sus 14 compromisos, anotando 1.135 tantos -equipo más realizador del grupo- y encajando únicamente 948 puntos. Solo dos conjuntos superaron al CB Canarias en defensa en esta fase de grupos de la Champions.
Su condición de líder facilitó a los insulares quedar exentos en la siguiente ronda de cruces, hasta llegar a los octavos de final, donde esperaba el PAOK de Salónica. Los tinerfeños perdieron por 66-63 en la ciudad griega, pero en la vuelta el Santiago Martín dictó sentencia. El 80-54 final no dejó lugar a la duda en un partido que el Iberostar Tenerife encarriló en el segundo cuarto.

Quedaban solo dos escalones más que subir para llegar a la Final Four y el rival iba a ser el Asvel Villeurbanne, campeón de la liga francesa y conjunto muy físico, similar al Strasbourg, que ya había conseguido llevarse el triunfo del Santiago Martín.

En la ida, verdes y aurinegros empataron a 62, dejando, una vez más, que todo se decidiera en Tenerife. Con La Hamburguesa completamente llena, los de Txus Vidorreta consiguieron ganar (61-51), con Georgios Bogris (16 de valoración) en plan estelar.

Por méritos propios, el Iberostar Tenerife se plantaba en la primera Final a Cuatro de Champions de la historia, dando la sensación de que es un equipo que siempre quiere más, con una ambición y competitividad que no parece tener límites.

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