El CD Tenerife empató a dos frente a otro aspirante al ascenso como es el Rayo Vallecano, dominadores de la primera parte. Sin embargo los blanquiazules remotaron hasta en dos ocasiones para finalmente lograr un punto que no mejora su situación en la tabla clasificatoria.
Le bastó siete minutos al Rayo Vallecano para adelantarse en el marcador. Grave error defensivo de Carlos Ruiz, quien erró un pase entragándole el balón al Chori Domínguez. Este solo tuvo que meter un pase profundo al segundo palo para que Aguirre lo rematase a placer. Se adelantaba así en el marcador el rayo, cuyo puesta en escena fue infinitamente mejor que la de los locales.
El Tenerife aprovechó al máximo una tímida llegada para intentar empatar la contienda. Lucas Aveldaño, titular ayer por la baja de Jorge, remató al larguero tras lanzar desde el centro del área. Asistencia de Juan Carlos Real con un centro al área tras un saque de esquina.
En el minuto 20, el infortunio se volvió a cebar con Juan Villar, que tuvo que salir del campo lesionado. Es el cuarto contratiempo de la temporada para el onubense, el tercero con la temporada ta arrancada. Lo relevó Víctor Casadesús.
Superada la media hora de juego, el Tenerife creció en el encuentro y comenzó a controlar el partido, generando así algunas ocasiones que fueron merecedoras de lograr el empate. La mayoría llegaron en acciones a balón parado.
Una de ellas la protagonizó Juan Carlos, quien probó fortuna desde lejos con un disparo potente que puso en aprietos al portero Alberto. Este mismo se tuvo que estirar para desviar a córner un remate de cabeza desde el centro del área de Casadesús.
En los últimos minutos, lo más destacado fue un remate fallado por Alejandro Domínguez, Rayo Vallecano, desde más de 30 metros que salió rozando la escuadra derecha.
La segunda parte arrancó sin cambios. Martí, quien tuvo que cambiar a Villar, mantuvo a los mismo que acabaron el primer acto.
Nada más arrancar el segundo acto, se vivieron en el Heliodoro dos minutos locos. Empató Samuele Longo en el minuto 50. Iñaki puso un balón medido a la cabeza del italiano, que dirigió la pelota a la perfección para colocar el 1-1 en el marcador.
Pero ya se sabe que la alegría del pobre dura poco o nada. Pues eso mismo es lo que duró el equilibro en el marcador. En la siguiente acción, volvió a cobrar ventaja el Rayo. Santi Comesaña marcó el 1-2 en una acción en la que los jugadores blanquizules reclamaban fuera de juego. No lo había debido a que Iñaki lo rompía. De esta manera las cosas volvían el mismo lugar que estaban cuando acabó la primera parte.
Minuto 57. La hora habitual de hacer cambios para Martí. La segunda sustitución la hizo para retirar a Juan Carlos y dar entrada a Malbasic.
Los tinerfeñistas se volcaron en atacar ante un Rayo que eliminó la presión alta que ejerció durante gran parte de la primera mitad. En esta segunda los visitantes se dedicaron a esperar al Tenerife en su campo.
El duelo se terminó de desnivelar en el minuto 68 cuano Santi Comesaña entró de manera dura y fea a Aitor Sanz. El colegiado le mostró la tarjeta roja directa y el Rayo se quedó con un jugador menos en el campo.
El tercer cambio del encuentro para los locales llegó en el minuto 73. Vitolo, que se estaba jugando la segunda amarilla, se retiró del campo para dar entrada a Bryan Acosta.
En los últimos minutos, el Tenerife echó toda la carne en el asador y logró empatar la contienda en el minuto 86. Una jugada blanquiazul enmarañada, en la que hubo varios rechaces en el área pequeña, Samuele Longo consigue el empate de cabeza.
Y tras lograr la igualada, el Tenerife incluso creyó que era posible llevarse la victoria. Tuvo la opción de conseguirlo por mediación de Bryan Acosta, un jugador con un disparo de media distancia tremendo. El hondureño lanzó un misil en el minuto 90 y Alberto, con muchas dificultades y luciendo reflejos, evitó el 3-2.
Finalmente los blanquiazules tuvieron que contentarse con el empate, logrado gracias a que tuvo que remontar un marcador adverso hasta en dos ocasiones.
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