Se me atragantó la Virgen
Cuando estaba en el seminario se me atragantó la Virgen. No me gustaba el rosario, me costaba entender a quienes se pasaban horas de rodillas ante la imagen de María que teníamos en la capilla (bonita, aunque un tanto bobalicona) y cargaban con postales de nuestra Señora en todas sus poses, marcas y vestuarios. Tras […]