La cofradía de pescadores del Gran Poder de Dios aprueba el proyecto del muelle deportivo, comercial, pesquero y turístico de Puerto de la Cruz, que tiene en cuenta dos de sus grandes reivindicaciones: una bocana más amplia y que las obras se hicieran en una fase y no en dos, como estaba inicialmente previsto.
“Serán los políticos quienes decidan si vienen o no cruceros”, manifestó ayer el patrón mayor, Carlos Carrillo, durante la inauguración oficial de la casa-museo, en la que se exponen y se pueden adquirir todo tipo de piezas relacionadas con el mar, desde réplicas de barcos, hasta camisetas de la Virgen del Carmen.
El recinto, que ha sido posible acondicionar gracias a los donativos de los turistas, se ubica en la sala de exposiciones de la cofradía y puede visitarse todos los días de 09.00 a 14.00 horas y los martes, miércoles y jueves de 16.00 a 18.30. El 80% del material que se muestra es propiedad del colectivo, aunque también hay maquetas de barcos prestadas y cedidas.
El acto contó con la asistencia del consejero de Agricultura, Ganadería, Pesca y Aguas del Gobierno de Canarias, Narvay Quintero; el presidente del Cabildo de Tenerife, Carlos Alonso; y el alcalde de la ciudad, Lope Afonso, entre otros. Todos ellos coincidieron en el esfuerzo y el sacrificio del sector para ofrecer otros servicios, como el de restaurante y pescadería. En este sentido, Carlos Carrillo hizo hincapié en los difíciles momentos que atraviesan los pescadores al poder trabajar solo seis meses al año y no contar con unas instalaciones adecuadas conlleva el riesgo de desaparecer.