El Cabildo palmero quiere que las mujeres del campo palmero, en el marco de Ley de Titularidad Compartida de Explotaciones Agrarias, puedan tener mayor protagonismo en el sector primario insular, con lo que este registro a nivel insular, en el que hasta ahora no figura ni una sola mujer, se corresponda con el peso específico que representan, y que hasta la fehca sigue estando supeditado a la titularidad de los hombres.
Desde el reconocimento de que “la igualdad legal de las mujeres en el campo palmero, no se corresponde con la igualdad real”, según las propias palabras pronunciadas en el pleno del Cabildo por el consejero de Agricultura, el socialista José Basilio Pérez, la institución asignará una partida presupuestaria con cargo a los presupuestos de este mismo año para financiar la celebración de seminarios informativos, dirigidos a mujeres del medio rural de toda la isla de La Palma.
Por extraño que parezca, y pese al trabajo diario y silencioso que miles de mujeres palmeras realizan en las labores del campo, son los hombres, sus maridos o parejas, quienes figuran como titulares de las explotaciones, lo que produce una desigualdad que impide, entre otras cosas, que las mujeres coticen a la Seguridad Social y por lo tanto adquieran unos derechos reconocidos una vez llegan a la vejez.
La moción presentada por el consejero del grupo Mixto, Daylos González, en el último pleno de la corporación, obtuvo el respaldo unánime de todos los grupos políticos del Cabildo, aunque con varias mejoras introducidas tanto por el grupo de gobierno, conformado por socialistas y nacionalistas, como por el Partido Popular. Los populares no quisieron dejar pasar la oportunidad para recriminar a los nacionalistas en el Gobierno de Canarias, los retrasos que desde la Comunidad Autónoma impusieron a la Ley de Titularidad Compartida de Explotaciones Agrarias, aprobada en 2011 por el Estado, pero recurrida por el Gobierno canario, que no creo el registro exigido hasta el pasado año 2016, cinco años más tarde que el resto de comunidades autónomas.
El Cabildo instará al Gobierno de España a que aplique ventajas fiscales para las ganaderas o agricultoras palmeras, productoras y cosecheras que se inscriban en este registro, que a día de hoy, pese a la realidad del protagonismo de la mujer palmera en la economía del sector primario, sigue sin una sola mujer registrada.
Dicen desde el Cabildo que deben ser respetuosos con el ámbirto competencial del Gobierno de Canarias, pero asumen como propia la responsabilidad de impulsar y potenciar el reconocimiento del papel de la mujer en el campo palmero, lo que pasa necesariamente por defender el reconocimiento jurídico, económico y social a través de esta ley.
La actividad de las mujeres en la agricultura palmera siempre ha sido intensa y cada vez más féminas toman el liderazgo de las explotaciones. Según los datos de la Cooperativa del Campo palmero, Cocampa, con más de 400 agricultores censados, “de las últimas 30 altas en la cooperativa en los últimos tres meses, se han inscrito seis mujeres”. El dato de las mujeres que han optado por darse de alta en esta cooperativa agraria, es de un total de seis mujeres de un total de 150 nuevos agricultores. Así lo constatan los datos facilitados por el gerente de la entidad, José Alberto Perestelo, que señala que “si se analizan los datos de 2016, de los 300 agricultores inscritos, el número de mujeres es de 50”, lo que representa un 16,6%.
El trabajo de las mujeres en el campo palmero se caracteriza por su invisibilidad y por falta de reconocimento económico y social. Pese a su trabajo constante, en la mayor parte de los casos tan sólo los hombres figuran como titulares de las explotaciones, mientras que las mujeres aparecen como cónyuges y en la categoría de una mera ayudante familiar.
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