Doris Valenzuela, la mujer colombiana que asesinó ayer presuntamente su marido en Murcia, había vivido en La Palma hasta el pasado mes de febrero. Esta mujer, de 39 años de edad, llegó a la Isla en febrero de 2017 dentro del Programa de Protección Temporal de Defensores de los Derechos Humanos de Amnistía Internacional, como recuerda la portavoz en La Palma de esta ONG, Montserrat Román.
El Grupo La Palma de Amnistía Internacional acogió a esta refugiada colombiana, junto a su pareja y sus tres hijos, dos hembras y un varón. Además, cabe destacar que durante su estancia en la Isla Bonita nació también su nieta.
Valenzuela pidió asilo en España y le fue concedido, y tras el año en La Palma, fue remitida a Murcia, donde estaba atendida por el Programa de Refugiados de Cruz Roja. Esta tragedia que ha dejado conmocionado a los miembros de este colectivo que la acompañaron durante su estancia en La Palma.
“Estamos consternados, echos polvos”, reconoció la portavoz de Amnistía, que valoró que Doris Valenzuela era “una mujer valiente”. “Siempre con una sonrisa, queriendo aprender, trabajando”. En cuanto a si en algún momento había dado alguna señal de que su pareja pudiera ser violenta, asegura que no observaron ningún comportamiento en este sentido ni ella tampoco dijo nada al respecto.
Según informa la prensa murciana, Doris Valenzuela murió víctima de varias cuchilladas asestadas presuntamente por su pareja. “El hombre, cuya identidad no ha trascendido, fue detenido poco después cuando trataba de huir por las calles de la ciudad, aunque el despliegue de los agentes de la Policía Local y de la Policía Nacional logró darle caza en la avenida Primero de Mayo, muy cerca del lugar del suceso, y tan solo unos minutos después de cometerse el crimen”, informa el diario La Verdad de Murcia.
Al parecer, la pareja fue separada hace más de un mes cuando Doris Valenzuela manifestó su intención de separarse, siendo trasladado su marido a otro piso de acogida en Gerona que abandonó para presentarse en Murcia.
Doris Valenzuela era integrante del colectivo la Consolidación de la Paz Comunidades en los Territorios (CONPAZ) y participó en el espacio humanitario Puente Nayero, donde fue parte del grupo de líderes de la comunidad. Valenzuela sufrió en Colombia amenazas de muerte por negarse a abandonar sus tierras.
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