El Gobierno de Canarias ha salido en defensa de su consejero de Sanidad, José Manuel Baltar, tras las acusaciones realizadas por el Grupo Socialista de utilizar su cargo para beneficiar a las empresas sanitarias privadas y en particular a San Roque, entidad de la que procedía. La consejera de Hacienda tildó de “infamia” estas manifestaciones de la diputada tinerfeña Patricia Hernández, que cifró en el 51% el incremento de las cirugías concertadas el año pasado a favor de Hospitales San Roque.
La socialista reaccionó ayer ante esta postura oficial del Ejecutivo de Clavijo (CC), reafirmándose en sus acusaciones contra el consejero Baltar, ex alto cargo de San Roque, y anunció que probará documentalmente “donde quieran y cuando quiera” sus críticas. Hernández se pregunta si, una vez demostrados los hechos, el presidente cesará al consejero
Rosa Dávila, durante su comparecencia para dar cuenta de los acuerdos adoptados en el Consejo de Gobierno, defendió la gestión de Baltar y aseguró que es “un magnífico consejero” que, a su juicio, trabaja con “eficacia y con eficiencia”. Como muestra de ello,señaló el descenso de las listas de espera quirúrgicas el 16%, que, según la consejera, se había producido el pasado año.
Además, Rosa Dávila dijo, en declaraciones recogidas por Europa Press, que el Gobierno de Canarias “pone en el centro del sistema al paciente”, y por ello considera que “intentar desacreditar a una persona de esa manera nos parece, como digo, una infamia, y en todo caso, tendrá su justa contestación donde corresponda”.
La gestión sanitaria de Baltar también está en el punto de mira de Podemos Canarias, cuya secretaria de Sanidad, Milagros Hormiga, asegura que el consejero es el “caballo de Troya” de la sanidad privada en el servicio público sanitario, por lo que considera que no solo debería renunciar al cargo, sino que “nunca” debería haber sido nombrado por un presidente que cree que está “por encima del bien y del mal”.
Para la dirigente de la formación morada, “es un escándalo que durante 12 años los distintos gobiernos presididos por Coalición Canaria, en connivencia con el PP y el PSOE, hayan retrasado la puesta en marcha de los requisitos para la homologación de los centros privados que están concertados”.
Hormiga insiste, además, en que desde el año 2006 “se ha estado prestando asistencia sanitaria sin acreditar la solvencia técnica y económica ni la capacidad de obrar exigibles para contratar con la Administración pública”. Asimismo, denuncia que en la orden del pasado 27 de marzo, por la que se establecen los requisitos que deben cumplir los centros sanitarios para su homologación en el grupo de hospitalización, “no se han establecido, mediante las correspondientes resoluciones, los requisitos de homologación para todos los grupos, por lo que se eternizará la preceptiva homologación de muchos de los centros hospitalarios privados que tienen concierto con la Administración”.
Como también ha denunciado el diputado Juan Márquez, la responsable de Sanidad considera que el Gobierno de Clavijo “ha aumentado los recursos derivados a la privada sin que suponga una mejora en las listas de espera, hasta el punto de que si no cambian las cosas, la sanidad en Canarias quedará completamente privatizada”.
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