Definitivamente, la relación entre SANTIAGO CALATRAVA y Tenerife parece condenada al divorcio. Si hace un tiempo el arquitecto valenciano que diseñó el Auditorio ADÁN MARTÍN se refirió a Tenerife como una isla que está en el “culo del mundo” y que no le merecía (aunque después rectificó y pidió disculpas), ahora surge un nuevo encontronazo, al rechazar cualquier responsabilidad en los desperfectos de la emblemática obra de Cabo Llanos.
El Cabildo acordó exigir la reparación de los vicios ocultos del proyecto, pero el estudio del arquitecto alega que los problemas “devienen de la ejecución” de los trabajos. No es la primera denuncia, ni probablemente será la última, contra CALATRAVA, que ya fue condenado por el Supremo a casi tres millones de euros por fallos en la construcción del Palacio de Congresos de Oviedo. Ah! Y un pequeño detalle: 72´3 millones nos costó el singular edificio.
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