Shapark Shajarizadeh, una mujer iraní de 42 años, realizó una protesta el pasado mes de febrero contra la obligación de llevar el velo islámico. Para ello, se situó en pleno centro de Teherán, en un lugar muy concurrido de tráfico, y ató su velo al extremo de un palo para después agitar el palo delante de los sorprendidos conductores.
La activista fue detenida y puesta en libertad unos meses después tras pagar una fianza. Ahora ha sido finalmente condenada a 20 años de cárcel.
Sin embargo, según Daily Mail, se desconoce su paradero actual y no ha habido comentarios por parte de los funcionarios iraníes acerca de su inminente encarcelamiento.
En un vídeo publicado en Twitter, Shajarizadeh afirmaba haber huido del país cuando fue liberada bajo fianza porque temió por su propia seguridad. Solo en el mes de febrero, según Daily Mail, la policía iraní arrestó a 29 mujeres por quitarse el pañuelo en público como parte de una campaña conocida como “Miércoles Blancos”. Nasrin Sotoudeh, una destacada abogada de derechos humanos que representó a Shajarizadeh y otras mujeres, fue arrestada el mes pasado.
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