el jardín

Cuando eres presidente de Francia, pero también hincha

El presidente francés se mostraba ayer, pese al diluvio que cayó sobre Moscú, como el hombre más feliz del planeta; besó y abrazó a la presidenta croata, y, sin chaqueta, celebró exultante el Mundial para su país

El presidente de Francia, Emmanuel Macron, sin chaqueta, celebraba ayer la victoria de su selección en el Mundial de Rusia como un rockero exultante, agitando los brazos al aire y saltando en el palco de autoridades.

La foto fue captada por el servicio de prensa de Putin, el anfitrión. El Kremlin, en un gesto que se presta a interpretaciones geopoliticas, no dudó en difundir la imagen, toda una declaración de complicidad con un país clave de la UE y flamante campeón del Mundo en la madre de todos los idiomas: el fútbol.

Macron (que besó y abrazó a Kolinda, la presidenta de Croacia) coreaba los goles de Griezmann, Mbapee y Pogba, las huestes de Deschamps, y, sabedor de la gran eficacia de los gestos, emuló al italiano Sandro Pertini en el Mundial de España de 1982, cuando la estrella de esa edición se la llevó para casa una Italia que ahora es uno de los dolores de cabeza de Europa y del propio Macron, por la deriva populista de su Gobierno.

TE PUEDE INTERESAR