La tercera edición del Isla Bonita Love Festival puso punto y final anoche con un concierto que reunió en el Puerto de Tazacorte a miles de personas que vibraron al ritmo de la música que protagonizó este espectáculo que trata de promover el respeto y la tolerancia a la diversidad sexual.
El momento más esperado de la jornada llegó casi a la media noche, con la aparición sobre el escenario de Maná, que puso toda la magia y fuerza de su directo con temas de su repertorio tradicional en el único concierto que ha realizado este año en Canarias. El público se entregó con la banda mexicana de rock, que se volcó en su actuación.
No era el muelle de San Blas, como el legendario tema de este grupo que actuaba anoche por segunda vez en la isla de La Palma, sino el de Tazacorte, que acogió por segundo año consecutivo este festival. Un puerto que ayer por la tarde volvió a recibir un barco de Naviera Armas, que trajo de Tenerife a La Palma alrededor de 400 personas a bordo para vivir el concierto que se prolongó hasta altas horas de las madrugada.
Los primeros en saltar al escenario fueron los madrileños Sidecars, que mostraron el talento de una banda que es hoy en día uno de los mejores sonidos de rock en España. A La Palma llegó también el cantante y compositor colombiano Sebastián Yatra, que dio el relevo a Sidecars en el escenario del Isla Bonita Love Festival, imprimiendo un nuevo ritmo a la noche del Festival, que defiende el respeto a las distintas formas de amar y la diversidad sexual.
Mientras tanto, cada vez se concentraba más público en el recinto portuario de Tazacorte, que registró su momento más álgido con la actuación de Maná, cabeza de cartel del concierto, que no defraudó al numeroso público que se dio cita en el concierto del Love Festival.
Pero la noche no concluyó con Maná. Todavía quedaban horas de música y diversión. Así Soraya Arnela volvió a poner a bailar al público con la fuerza que acostumbra a poner sobre el escenario la cantante que se dio a conocer en el popular concurso de televisión Operación Triunfo.
La música house de Inna y la dj ucraniana Juicy M pusieron el cierre al concierto del Love Festival, que ha reunido a lo largo de esta semana una apretada agenda social relacionada con la promoción y defensa de los derechos del colectivo LGTBI.