José Luis Guadalupe Guada, dejó de pertenecer a la disciplina del Ademi Tenerife tras 23 años. El club de deporte adaptado le comunicó la noticia de su despido al técnico tinerfeño, que reconocía que era “un día triste” al tener que anunciarlo.
“La situación económica ha llegado a ser insostenible, después de ocho meses sin cobrar y asumiendo gastos propios en desplazamientos en competiciones de club y por intentar sacar la natación competitiva adelante en este último año. Aunque me gusta lo que hago, no puedo trabajar por amor al arte”, indicaba el entrenador, habitual también en todas las competiciones internacionales con la selección española de natación adaptada.
Pese a esa tristeza por poner punto y final a su trayectoria, Guada dijo estar “agradecido” al Ademi “como entidad” donde se formó como “persona y entrenador” formándose y creciendo en el mismo.
Una carrera meteórica
El técnico entró a formar parte del Ademi en 1995, bajo la presidencia de Rosendo Alonso, que le dio la oportunidad de entrenar a deportistas adaptados: “Recuerdo mi primer día, con un chico con rasgos de esquizofrenia, que no quería nadar y era agresivo y una chica ciega, sorda, muda y con discapacidad física de nacimiento, que se comunicaba conmigo con el tacto y yo pensando en dónde me había metido”.
Su ascenso como responsable de la sección de natación le permitió acercarse a los nadadores más pequeños, siendo ahí donde desarrollaría principalmente su labor, la que le ha llevado a ser uno de los entrenadores de natación adaptada más respetados de España: “En 1997 empezamos a admitir, rompiendo moldes en clubes de deportes para personas con discapacidad, a niños sin discapacidad, algo que venía perfecto para que hubiese un nivel de rendimiento de entrenamientos más competitivo”.
El Ademi logró su primera medalla en natación en Cádiz, en 1999, aquello fue un punto de inflexión no solo para el club, también para Guada: “La consiguió Dácil Cabrera Flores, con solo 15 años. Creo que junto a la medalla de oro de Michelle en Río 2016 y Londres 2012, han sido las tres grandes medallas de mi vida. Y Ojalá lleguen más”.
Porque, por el momento, José Luis Guadalupe quiere tomarse un tiempo de reflexión tras dejar una entidad que ha “defendido” durante 23 años “sacrificando muchas veces la vida familiar por la implicación y dedicación a este deporte”.
“Todo esto ha servido de poco. En mi caso, para acabar despedido después de 23 años ininterrumpidos, siendo incluso socio de honor del club, premio nacional AETN RFEN a la trayectoria profesional, premio APDT a la Dedicación Deportiva o perteneciendo al cuerpo técnico del equipo paralímpico español desde Londres 2012 y seleccionador nacional FEDDI este año”, finalizaba visiblemente triste.
El gran hacedor de estrellas tinerfeñas
Guada alcanzó gran popularidad después de ser el entrenador de Michelle Alonso, Premio Taburiente de Diario de Avisos 2018, una nadadora que ha logrado llevar la natación adaptada a donde nunca nadie antes, siendo también técnico de Judit Rolo, otro de los referentes nacionales de esta disciplina deportiva.
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