La tensión se eleva en Venezuela después de la toma de posesión de Nicolás Maduro y a escasos dos días de que se retome la protesta en la calle por parte de la oposición, con una primera falla que se ha abierto en la principal institución que valida al chavismo: la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB). Por pequeña que sea, la revuelta que se ha dado esta madrugada en el cuartel de San José de Cotiza, en Caracas, por 27 militares, ha puesto de manifiesto que algo se mueve en los cuarteles de Venezuela, aunque el Gobierno lance el mensaje de “normalidad”.
Es pronto para saber si el mensaje de transición lanzado por la oposición a partir del 10 de enero se ha colado en los cuarteles venezolanos y se empieza a resquebrajar la lealtad que, aparentemente, rendían al Gobierno de Maduro los militares. Pero sí es evidente que al menos una grieta se ha abierto y la llamada realizada por la oposición para que el ejército no legitime el segundo mandato del presidente de la República se ha filtrado en el estamento militar.
La revuelta de Cotiza fue rápidamente aplacada por la FANB, que detuvo con rapidez a este “reducido grupo” de militares venezolanos que se declaró de madrugada contra el Gobierno de Maduro. Una revuelta que dieron a conocer mediante la difusión por las redes sociales de una serie de vídeos en los que ponían de manifiesto que no reconocían la legitimidad de Maduro y abogaban por recuperar el “hilo constitucional”, que se habría roto con la toma de posesión del presidente.
Los vídeos fueron difundidos por Soldados de Franela, un grupo de militares descontentos con el Gobierno que ya ha reivindicado varias acciones, tal y como informa Europa Press. Así se atribuyeron el supuesto atentado perpetrado el pasado 4 de agosto con drones explosivos durante un desfile castrense en Caracas, del que Maduro salió ileso.
A la revuelta militar, la acompañó una protesta de civiles en el corazón de este barrio caraqueño, que fue reprimida por miembros de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado con contundencia, llegando a emplear gases lacrimógenas para reprimir a los manifestantes. Un primer balance de estas protestas arroja al menos tres personas heridas, según informa el periódico El Nacional.
Las reacciones políticas a estos movimientos no se hicieron esperar y el presidente de la Asamblea Nacional y nuevo líder de la oposición venezolana, Juan Guaidó, mostró su solidaridad y reconocimiento al “bravo pueblo de Cotiza”. Mientras que Diosdado Cabello, el número dos del chavismo, aseguró que los soldados detenidos, “lo primero que dijeron fue que les ofrecieron villas y castillos y los dejaron solos, que los habían engañado”.
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