
El Tribunal de Jurado Popular constituido para decidir el proceso por la violenta muerte del empresario tinerfeño Raimundo Toledo ha declarado culpables a dos de los tres acusados, Alexander R.R. y Sandra P.R., de un delito de asesinato y otro de detención ilegal.
Al tercero de los encausados (Diego Claudio G.G.) solo se le condena como responsable de la detención ilegal, un delito que el interesado confesó desde el primer momento, al igual que siempre negó tener que ver con la muerte de Toledo ya que, asegura, se fue cuando aún estaba con vida.
Así consta en el veredicto que se acaba de entregar en la Audiencia Provincial de Santa Cruz de Tenerife, y que recoge un acuerdo de los nueve miembros que fue adoptado por unanimidad.
Cabe recordar que las acusaciones solicitaban para los tres encausados un total de 31 años de prisión para cada uno, si bien será ahora la magistrada encargada del caso quien, en unas semanas, fijará las penas en la correspondiente sentencia. En todo caso, dicha pena solo correspondería ahora a Sandra y Alexander.