política

Las soluciones a las colas van despacio: se atascan en los despachos

Las obras proyectadas y el dinero presupuestado comprometen la gestión del Ejecutivo autonómico, que colisiona con el colapso viario
Domingo Negrín MorenO Santa Cruz de Tenerife Durante la novena legislatura canaria, el asunto de las carreteras se ha dilucidado en una pista de coches locos del modelo de los Picapiedra. Y el convenio bilateral entre las Administraciones regional y nacional gira sin freno en un tiovivo. El último capítulo de la historieta ha sido, hasta la fecha, que el Gobierno de Fernando Clavijo (CC) ha vuelto a apelar a la Justicia para que “quede aclarada” la ejecución de la sentencia por la que se debe abonar a la comunidad autónoma 845 millones de euros más unos 100 millones en intereses por los recortes en el anterior acuerdo, a pesar del arreglo con Mariano Rajoy (PP) y Pedro Sánchez (PSOE). “Sustituyeron las cartas al discutir la cuantía e intentar cercenar más de 345 millones de euros”, se ha quejado la portavoz oficial y consejera de Hacienda, Rosa Dávila. Ya en abril de 2014, el titular del área competente en las obras viarias, Domingo Berriel (CC), denunció que Canarias había recibido 177 de los 639 millones previstos y la ministra Ana Pastor anunció en Tenerife que se trabajaría en la firma de un nuevo convenio “si la cosa” mejoraba. En julio de 2015, el Ejecutivo canario se llevó un segundo varapalo tras la resolución sobre la anualidad de 2012. La Sala de lo Contencioso de la Audiencia Nacional desestimó una demanda de Paulino Rivero contra un incumplimiento cifrado en 207 millones. En febrero de 2018, el Tribunal Supremo elevó la deuda a 290 millones, al sumar la cantidad de 2013 a la de 2012. Las cifras concretas no se conocen exactamente: sería más sencillo contar los anillos de Júpiter. Entre dimes y diretes, Fernando Clavijo desistió de asistir el 22 de diciembre en Madrid a la rúbrica del convenio por el que el Ministerio de Fomento aportará 1.200 millones de euros para la construcción de carreteras. En presencia del ministro, José Luis Ábalos, el vicepresidente y consejero canario de Obras Públicas, Pablo Rodríguez, recordó, al estilo de los chistes de Gila, los 300 millones pendientes por las partidas no abonadas en los años precedentes. Ábalos señaló el retrovisor para evocar las dos adendas del documento de 2006 (2009 y 2017), dotadas con un importe máximo de 2.437 millones. Los lamentos imitan el sonido de un motor ahogado. La oposición lo ha calado. Incisivo en impugnar el “engaño” ha sido Román Rodríguez, de Nueva Canarias: “Clavijo ha renunciado a 280 millones de euros de las anualidades de 2018 y 2019, que repercutirá negativamente en el cumplimiento de la ley de los Presupuestos Generales del Estado de 2018 y de los de 2019”. La diputada Esther González destapó que la ejecución de los presupuestos iniciales, en el primer año de Pablo Rodríguez (CC), era de apenas el 20%: “Además de la pésima gestión presupuestaria de las obras en 2017, la errática estrategia jurídica impedirá recuperar los 295,6 millones cercenados en 2015 y 2016”. Patricia Hernández (PSOE) ejercía de vicepresidenta autonómica cuando, desde junio de 2015 hasta diciembre de 2016, la Consejería de Obras Públicas la dirigía Ornella Chacón; hoy, jefa del ente público Puertos del Estado. A modo de ejemplo, ilustró en la comisión que los trabajos en el enlace de Las Chafiras-Oroteanda (sur de Tenerife) consistían en “levantar polvo” y que allí no había maquinaria. Pablo Rodríguez alegó en febrero que se habían realizado tres certificaciones y seis unidades de obra. “Lo único que hacen la pala y el camión es remover tierra para que la gente crea que se hace algo”, machacó Hernández. Un lustro después de la redacción del proyecto de Las Chafiras-Oroteanda, Clavijo visitó el lugar en compañía de Rodríguez y del presidente del Cabildo, Carlos Alonso, para decir que reducirá el 50% el tiempo de recorrido en la conexión con la TF-1. “Dará respuesta a la congestión de tráfico que se produce diariamente”, profetizó. Previamente, Hernández acusó a Pablo Rodríguez de “robar horas de sueño” a los tinerfeños por “no gastar ni un euro” en la TF-5 (autopista del Norte). En el transcurso de una comparecencia, lo retó a empatizar con la “desesperación” de los ciudadanos, que sufren una “cola habitual” que se complica en días de lluvia o por algún contratiempo: “Tiene dinero y convenio, no tire balones fuera, diga por qué no se ha invertido. Una persona que viva en el Puerto de la Cruz pierde cada año 5,33 días en el trayecto de ida a Santa Cruz”. En noviembre, el PP se desmarcó del Pacto por Tenerife, suscrito con Carlos Alonso, en protesta por la “ocurrencia” de que la licitación del cierre del anillo insular solo incluía un carril de entrada y salida al túnel de Erjos. “Es un paso atrás”, enfatizó Manuel Domínguez. La “tomadura de pelo” del tercer carril de Guamasa a La Laguna en la TF-5 le abochornó tanto que urgió la dimisión de Alonso “por decencia”. La “soberbia”, la “poca transparencia” y el “escaso sentido institucional” le inducen a sentir “vergüenza ajena”. En el Parlamento, Asier Antona (PP) le pintó la cara de colores a Rodríguez: “El colapso perjudica al desarrollo económico, al empleo y a la calidad de vida. Se han dejado mangonear por los caprichos del presidente del Cabildo de Tenerife, que muda de opinión cada vez que se levanta”. En este recorrido, el PSOE ha afrentado a las autoridades los “constantes cambios de criterio”. En palabras de Pedro Martín, alcalde de Guía de Isora, secretario insular y candidato a ocupar el cargo de Alonso, “las soluciones que se reclamaban un día dejan de serlo al siguiente”. Sobre la variante de Los Rodeos, con el soterramiento del tercer carril en la TF-5 o el carril Bus-VAO, entiende que carece de lógica vincular el resultado a los horarios de la Universidad de La Laguna o las consultas médicas en el HUC. Aurelio Abreu, presidente del Grupo Socialista en el Cabildo tinerfeño y número dos de la Corporación, alertó de que las peleas entre Alonso y Rodríguez, al igual que con Chacón, “alargan las colas”. Los atascos burocráticos agravan el caos que se ha adueñado del asfalto. ¡Yabadabadú!
Visita institucional a las obras del enlace de Las Chafiras-Oroteanda, en el sur de Tenerife. / DA
Visita institucional a las obras del enlace de Las Chafiras-Oroteanda, en el sur de Tenerife. / DA

Durante la novena legislatura canaria, el asunto de las carreteras se ha dilucidado en una pista de coches locos del modelo de los Picapiedra. Y el convenio bilateral entre las administraciones regional y nacional gira sin freno en un tiovivo. El último capítulo de la historieta ha sido, hasta la fecha, que el Gobierno de Fernando Clavijo (CC) ha vuelto a apelar a la Justicia para que “quede aclarada” la ejecución de la sentencia por la que se debe abonar a la comunidad autónoma 845 millones de euros más unos 100 millones en intereses por los recortes en el anterior acuerdo, a pesar del arreglo con Mariano Rajoy (PP) y Pedro Sánchez (PSOE). “Sustituyeron las cartas al discutir la cuantía e intentar cercenar más de 345 millones de euros”, se ha quejado la portavoz oficial y consejera de Hacienda, Rosa Dávila.  

Ya en abril de 2014, el titular del área competente en las obras viarias, Domingo Berriel (CC), denunció que Canarias había recibido 177 de los 639 millones previstos y la ministra Ana Pastor anunció en Tenerife que trabajaba en la firma de un nuevo convenio, “si la cosa” mejoraba. En julio de 2015, el Ejecutivo canario se llevó un segundo varapalo tras la resolución sobre la anualidad de 2012. La Sala de lo Contencioso de la Audiencia Nacional desestimó una demanda de Paulino Rivero contra un incumplimiento cifrado en 207 millones. En febrero de 2018, el Tribunal Supremo elevó la deuda a 290 millones, al sumar la cantidad de 2013 a la de 2012.  Las cifras concretas no se conocen exactamente: sería más sencillo contar los anillos de Júpiter. 

Entre dimes y diretes, Fernando Clavijo desistió de asistir el 22 de diciembre en Madrid a la rúbrica del convenio por el que el Ministerio de Fomento aportará 1.200 millones de euros para la construcción de carreteras. En presencia del ministro, José Luis Ábalos, el vicepresidente y consejero canario de Obras Públicas, Pablo Rodríguez, recordó, al estilo de los chistes de Gila, los 300 millones pendientes por las partidas no abonadas en los años precedentes. Ábalos señaló el retrovisor para evocar las dos adendas del documento de 2006 (2009 y 2017), dotadas con un importe máximo de 2.437 millones. 

Pablo Rodríguez, vicepresidente y consejero de Obras Públicas. / SERGIO MÉNDEZ
Pablo Rodríguez, vicepresidente y consejero de Obras Públicas. / SERGIO MÉNDEZ

 

Ornella Chacón, consejera del Gobierno de Canarias entre junio de 2015 y diciembre de 2016. / DA
Ornella Chacón, consejera del Gobierno de Canarias entre junio de 2015 y diciembre de 2016. / DA

 

Los lamentos imitan el sonido de un motor ahogado. La oposición lo ha calado. Incisivo en impugnar el “engaño” ha sido Román Rodríguez, de Nueva Canarias: “Clavijo ha renunciado a 280 millones de euros de las anualidades de 2018 y 2019, que repercutirá negativamente en el cumplimiento de la ley de los Presupuestos Generales del Estado de 2018 y del de 2019”. La diputada Esther González destapó que la ejecución de los presupuestos iniciales, en el primer año de Pablo Rodríguez (CC), era de apenas el 20%: “Además de la pésima gestión presupuestaria de las obras en 2017, la errática estrategia jurídica impedirá recuperar los 295,6 millones cercenados en 2015 y 2016”. 

Patricia Hernández (PSOE) ejercía de vicepresidenta autonómica cuando, desde junio de 2015 hasta diciembre de 2016, la Consejería de Obras Públicas la dirigía Ornella Chacón; hoy, jefa del ente público Puertos del Estado. A modo de ejemplo, ilustró en la comisión que los trabajos en el enlace de Las Chafiras-Oroteanda (sur de Tenerife) consistían “levantar polvo” y que allí no había maquinaria. Pablo Rodríguez alegó en febrero que se habían realizado tres certificaciones y seis unidades de obra. “Lo único que hacen la pala y el camión es remover tierra para que la gente crea que se hace algo”, machacó Hernández. 

Un lustro después de la redacción del proyecto de Las Chafiras-Oroteanda, Clavijo visitó el lugar en compañía de Rodríguez y del presidente del Cabildo, Carlos Alonso, para decir que reducirá en un 50% el tiempo de recorrido en la conexión con la TF-1. “Dará respuesta a la congestión de tráfico que se produce diariamente”, profetizó. Previamente, Hernández acusó a Pablo Rodríguez de “robar horas de sueño” a los tinerfeños por “no gastar ni un euro” en la TF-5 (autopista del Norte). En el transcurso de una comparecencia, lo retó a empatizar con la “desesperación” de los ciudadanos, que sufren una “cola habitual” que se complica en días de lluvia o por algún contratiempo: “Tiene dinero y convenio, no tire balones fuera, diga por qué no se ha invertido. Una persona que viva en el Puerto de la Cruz pide cada año 5,33 días en el trayecto de ida a Santa Cruz”. 

En noviembre, el PP se desmarcó del Pacto por Tenerife, suscrito con Carlos Alonso, en protesta por la “ocurrencia” de que la licitación del cierre del anillo insular solo incluía un carril de entrada y salida al túnel de Erjos. “Es un paso atrás”, enfatizó Manuel Domínguez. La “tomadura de pelo” del tercer carril de Guamasa a La Laguna en la TF-5 le abochornó tanto que urgió la dimisión de Alonso “por decencia”. La “soberbia”, la “poca transparencia” y el “escaso sentido institucional” le inducen a sentir “vergüenza ajena”. En el Parlamento, Asier Antona (PP) le pintó la cara de colores a Rodríguez: “El colapso perjudica al desarrollo económico, al empleo y a la calidad de vida. Se han dejado mangonear por los caprichos del presidente del Cabildo de Tenerife, que muda de opinión cada vez que se levanta”. 

En este recorrido, el PSOE ha afrentado a las autoridades los “constantes cambios de criterio”. En palabras de Pedro Martín, alcalde de Guía de Isora, secretario insular y candidato a ocupar el cargo de Alonso, “las soluciones que se reclamaban un día dejan de serlo al siguiente”. Sobre la variante de Los Rodeos, con el soterramiento el tercer carril en la TF-5 o el carril Bus-VAO, entiende que carece de lógica vincular el resultado a los horarios de la universidad de La Laguna o las consultas médicas en el HUC. Aurelio Abreu, presidente del grupo Socialista en el Cabildo tinerfeño y número dos de la corporación, alertó de que las peleas entre Alonso y Rodríguez, al igual que con Chacón, “alargan las colas”.  

Los atascos burocráticos agravan el caos que se ha adueñado del asfalto. ¡Yabadabadú! 

Se ve que la movilización atrajo la atención del ministro Ábalos

 

El secretario de Estado de Infraestructuras, Transporte y Vivienda, Pedro Saura, y el consejero de Obras Pública y Transportes de Canarias, Pablo Rodríguez, firman el convenio de carreteras en presencia del ministro de Fomento, José Luis Ábalos. / DA

El Ejecutivo canario se movilizó para rescatar el convenio de carreteras del socavón. El empeño en el empujón obtuvo su premio el 22 de diciembre de 2018, el día del sorteo extraordinario de la Lotería Nacional. No acudió Fernando Clavijo, que se quedó comprobando el décimo. Ábalos lo consultó en el teléfono inteligente. 

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