Una nueva factura abusiva se ha vuelto viral en redes sociales en las últimas horas. Roma vuelve a ser la ciudad en la que unos turistas se han visto sorprendidos por lo que muchos denominan “un robo” que ha sido portada, incluso, del prestigioso diario Il Messaggero.
El pasado 2 de noviembre una familia de la región italiana de Apulia tuvo que pagar 120 euros por tres perritos calientes (con papas fritas, eso sí), un sándwich de jamón y queso y varios refrescos y una botella de agua. Todo ello en un local de la Via della Conciliazione, una de las más concurridas de la ciudad italiana.
El gerente del local, en declaraciones al mismo local, admitía haber sufrido otras quejas de este tipo, aunque explicaba sus razones: “No son precios populares, pero están en la carta, lo pueden ver antes de pedir”.
En los últimos tiempos se ha abierto un debate en Roma debido a este tipo de situaciones que se repiten, cada vez más. Diversas organizaciones de consumidores y asociaciones turísticas creen que este tipo de precios abusivos perjudican seriamente la imagen exterior y la economía de la ciudad.
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