Santa Cruz mantuvo ayer su primera jornada de Carnaval de Día que, eso sí, se celebró en medio de una intensa calima que, prácticamente, ocultó la capital bajo una densa capa de polvo en suspensión sahariano, lo que no desanimó a centenares de carnavaleros a salir a la calle, alguno incluso con mascarilla, después de que el Ayuntamiento cancelase los bailes carnavaleros previstos para la noche del sábado por la previsión de fuertes vientos.
La comisión política y técnica del Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife determinó, tras una reunión mantenida a primera hora de ayer, retomar la programación del Carnaval santacrucero prevista para ayer, así como desactivar el Plan Municipal de Emergencias que se decretó en la tarde del pasado sábado, en base a la alerta por vientos declarada por el Gobierno de Canarias sobre el área metropolitana de Tenerife.
Esta decisión se sustentó tras la evaluación de las predicciones meteorológicas para ayer, que indicaban que no existían riesgos generales para la población, así como los informes de los recursos policiales y de emergencias.
Así pues, se ordenó que se iniciasen, de manera inmediata, los trabajos de montaje en los diferentes escenarios del Carnaval. En concreto, la programación ofrecida por el Ayuntamiento se concentró en tres grandes puntos: escenarios de la avenida Francisco La Roche, plaza de la Candelaria y plaza del Príncipe. K-Narias, Don Patricio, Maikel Delacalle y Efecto Pasillo fueron algunos de los nombres que pasaron por el gran escenario de la avenida Francisco La Roche, donde se concentró mayor cantidad de público bailando bajo la intensa capa de calima. De hecho, esta situación meteorológica provocó que, hasta las 18.00 horas de ayer, cuatro personas fuesen atendidas en el Hospital del Carnaval por problemas respiratorios, según fuentes municipales.
La fiesta se intensificó durante la tarde y se prolongó hasta la madrugada. En este sentido, el Ayuntamiento decidió ampliar hasta las seis de la mañana de hoy lunes el horario de este primer Carnaval de Día, tras la evaluación de las predicciones meteorológicas, que indicaban que no existían riesgos generales.
Aún así, según reflejó el World Air Quality Index, que mide la calidad del aire en ciudades de todo el planeta, la calidad del aire en la Isla ayer fue, por segundo día consecutivo, una de las peores en el mundo.
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