El famoso monologuista y actor protagonista del taquillazo ‘Ocho apellidos vascos’, reconocido estos últimos años por utilizar su popularidad para dar visibilidad a diversas causas sociales, acaba de anunciar que ha superado el cáncer que le diagnosticaron el pasado marzo, concretamente linfoma de Hodgkin.
A través de un mensaje publicado en Instagram, el actor explica que los médicos dan por concluido su tratamiento tras “seis meses de subida a una de las montañas más duras” que ha tenido que enfrentar y que desde donde está ahora (curado de su cáncer) las “vistas son maravillosas”.
Rovira agradece en el mismo mensaje a todas las personas que “de una manera u otra” lo han aliviado y ayudado en ese tránsito vital tan duro, en especial a su compañera de vida, Clara Lago, actriz a la que conoció durante el rodaje de esa película, la más taquillera de la historia del cine español.
Se despide en el mensaje con un sentido homenaje a Pablo Ráez, aquel chaval que enfermo de leucemia enseñó a toda España que había que ser “siempre fuerte” aunque, desgraciadamente, él no pudo superar su dolencia. Sin embargo sí que dio un enorme ejemplo de lucha y dejó una profunda huella en la sociedad española que todavía hoy, dos años y medio después de su triste fallecimiento, muchos recordamos. Rovira vivió una especial amista con él, a quien visitó continuamente en el hospital hasta su fallecimiento impresionado por su ejemplo y fortaleza.