La pandemia acabó con los planes deportivos de muchos competidores que vieron truncados sus objetivos por el confinamiento y la consiguiente suspensión de actividades y torneos. En el caso de Melissa Tudge el sueño sigue vivo.
La boxeadora tinerfeña se tuvo que volver para casa hace un año cuando estaba a un día de debutar en el preolímpico de Londres. Hace unos días se anunció que los deportistas que estaban en el torneo con sus cruces ya sorteados tendrán la oportunidad de clasificarse en una nueva cita que se llevará a cabo del 4 al 8 de junio en París.
Aquel 16 de marzo de 2020 quedó para siempre en el recuerdo de la boxeadora tinerfeña de la selección española. Fue el día que le comunicaron que tenían que volverse para casa para confinarse y que su sueño olímpico quedaba congelado.
“Fueron momentos de mucha incertidumbre porque, en cierto modo agradecíamos estar en Londres ya que en España se había decretado el estado de alarma y el confinamiento, pero allí se hacía una vida relativamente normal, con público en las gradas, sin restricciones y no sabíamos qué nos íbamos a encontrar cuando volviéramos a casa”, recordaba Melissa ayer antes de reconocer que ahora “voy con todo para poder ganar y estar en Tokio”.
“Es una alegría inmensa el poder reanudar el preolímpico porque estábamos con tantas dudas, de saber si se hacían los Juegos o no, de si se podría llegar a tiempo de hacer los clasificatorios… y al final ya sabemos que podremos pelear por tratar de conseguir lo que es un sueño, estar en una cita olímpica”, resumía la tinerfeña.
Después de vivir “la tremenda decepción” del año pasado en Londres cuando tuvo que regresar a casa “pensando que serían dos semanas de confinamiento que se convirtieron en más de dos meses”, Melissa tiene por delante ahora “un periodo de entrenamiento muy duro que afrontaremos con toda la ilusión para ir al cien por cien a por la clasificación”.
Desde la concentración de la selección española, Melissa confesaba que ahora no mira hacia atrás. “Estamos con la mirada al frente para clasificarnos”, dijo una deportista que se medirá a la representante húngara y, en caso de victoria, a la vencedora de la eliminatoria entre Turquía y Rusia. Su sueño sigue latente.