La pandemia de la COVID, el volcán de La Palma o la guerra en Ucrania. Son factores exógenos a Canarias que tienen un punto en común: afectan a la actividad económica, y por ende, a la vida de las personas. En este contexto, la Confederación Provincial de Empresarios (CEOE) de Santa Cruz de Tenerife celebra elecciones el próximo miércoles, día 6. Unos comicios en los que se enfrentan Pedro Alfonso, hasta ahora secretario general de la entidad, y Victoria González Cuenca, directora financiera de Chafiras, aspirando a suceder a José Carlos Francisco, que cumple ocho años como máximo representante de la patronal tinerfeña.
No obstante, este proceso de relevo, que en un inicio lideraba Alfonso y al que más tarde se sumaría González Cuenca, no ha estado exento de polémica. Es más, se diría que está marcado por las quejas, reclamaciones y bailes de datos. El pasado 8 de marzo, cuatro patronales sectoriales remitían una carta al presidente en la que ponían de relieve la presunta existencia de “irregularidades” y “falta de transparencia” en la organización de los sufragios. En concreto, lo hacían la Asociación Empresarial de Alquiler de Coches de Canarias (Apeca), la Asociación Hotelera y Extrahotelera de Tenerife, La Palma, La Gomera y El Hierro (Ashotel), la Federación de Alimentación y Artículos de Consumo de Canarias (Facca) y la Federación de Empresas del Metal de Santa Cruz de Tenerife (Femete).
Ahora, las dudas giran en torno a la candidatura de Pedro Alfonso, ya que, como ha podido saber DIARIO DE AVISOS, la empresa a la que representaba se ha dado de baja de la CEOE. Según los Estatutos, accesibles en la sección de Transparencia de la página web de la Confederación, esto provocaría que Alfonso perdiera la condición de representante de un miembro de pleno derecho. Fuentes jurídicas consultadas por esta redacción apuntan al artículo 4.a, que recoge que “la condición de miembro se pierde por renuncia de la Organización o Empresa Confederada, aprobada por su órgano competente”. Una regla que también especifica que “la separación de la organización o empresa miembro tiene como consecuencia directa que los representantes nombrados por éstas en los Órganos de Gobierno, trabajo o consulta, internos o externos, dejen de ejercer automáticamente dicha representación”.
De acuerdo con un documento al que ha tenido acceso este periódico, el administrador único de la empresa a la que representaba Alfonso en la CEOE, con domicilio social en el municipio de Güímar, manifestó su “renuncia de dicha entidad” el pasado 30 de marzo. Una baja que se ejecutaría “con efecto inmediato” por deseo expreso de la empresa, y de la que tomó conocimiento un administrativo de la organización el mismo día a las 12.00 horas, estampando su sello, nombre y firma al pie de página, junto a la rúbrica del responsable de la compañía.
A preguntas del DIARIO sobre este asunto, Pedro Alfonso no quiso aportar detalles acerca de su relación con la empresa que ahora se ha dado de baja. Únicamente afirmó: “Yo ya tengo presentada mi candidatura desde hace 15 días y está tramitada sin problema (…) nadie me ha puesto ningún problema de nada”. Y señaló al órgano competente en materia electoral para la resolución de cualquier duda respecto a su legitimidad o validez para ser aspirante a la Presidencia. En lo que a él se refiere, dijo, “solo me dedico a los temas de gestionar mi candidatura”.
Por su parte, José Carlos Francisco confirmó que el candidato a sucederle representaba a la empresa güimarera en la entidad, si bien rehusó entrar en materia, expresando su respeto al proceso en marcha. “Creo que Pedro Alfonso había presentado su candidatura con anterioridad”, indicó, al tiempo que deslizó la idea de que otra compañía pudiera avalar a Alfonso: “Yo creo que hay alguna otra empresa que le respalda también”, nuevamente recalcando que se trata de “temas propios del proceso electoral”.
En cuanto a la rival de Alfonso, Victoria González Cuenca, declaró a este periódico que para ella este hecho, “si se confirma”, constituye “una nueva irregularidad”, como las ya denunciadas por las cuatro patronales sectoriales. En tal caso, prosiguió: “Según los Estatutos, no es representante y no puede estar en los órganos de gobierno”. “No nos han comunicado nada desde la CEOE”, aseveró, y puso el acento en que “todavía no han convocado la Mesa Electoral”. En este sentido, continuó diciendo que “estoy a la espera de que me digan cómo está compuesta”, dado que, de lo contrario, no puede conocer “la composición de las candidaturas”. “No tengo ninguna información sobre ninguna de las dos candidaturas”, añadió. Además, cuestionada por la empresa con domicilio en Güímar, sostuvo que sí la conoce, en la medida en que le han facilitado, como aspirante a presidenta, “el listado de todos los representantes y miembros de pleno derecho”.
SUFRAGIOS CAPITALES
Estas elecciones adquieren aún más importancia, si cabe, por el marco en el que se producen. El Archipiélago ha sufrido, desde el año 2020 hasta la actualidad, la mayor sucesión de crisis que se recuerda, y están en marcha distintas estrategias de reconstrucción y respuesta a las coyunturas ya mencionadas. Por ejemplo, en la Isla Bonita se están ejecutando acciones encaminadas a restablecer el tráfico viario de diferentes zonas, después de que una importante cantidad de carreteras fueran destruidas por el paso de las coladas de lava del volcán de Cumbre Vieja. A eso se suman las ayudas directas a empresas que las administraciones, desde el Cabildo palmero hasta el Gobierno central, pasando por el Ejecutivo autonómico, han dispuesto para paliar las consecuencias de la erupción en el tejido productivo local.
El pasado martes, el Consejo de Ministros aprobaba un plan nacional de respuesta al impacto que ha traído consigo la guerra en el Este de Europa, en el que hay voces que piden contemplar especificidades para las Islas, si bien la bonificación de 20 céntimos por litro de combustible afecta, igualmente, a la Comunidad Autónoma. Y es que el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania ha venido aparejado, sobre todo, de problemas en el sector de la energía, cuyo coste ha aumentado considerablemente con el paso de las semanas, y para el que se están ideando soluciones, que pasan, también, por el fomento de las renovables, de las que Canarias es valedora.
La CEOE, como patronal de la provincia occidental, carga sobre sus espaldas la responsabilidad de representar a más de un millón de isleños. Un cometido que, a lo largo de los últimos dos años, ha estado personificado en la figura del economista y escritor José Carlos Francisco, un peso pesado del gremio empresarial canario. Su sucesión, como viene siendo costumbre en organizaciones de este tipo, parece estar a punto de contar con una nueva duda jurídica que resolver.