Las redes sociales fueron, en las primeras horas del viernes, un hervidero de aficionados del CD Tenerife entusiasmados, tras hacerse oficial el fichaje de Mo Dauda hasta el 30 de junio de 2023, cedido por el Anderlecht.
Un fichaje que se cocinó a fuego lento porque desde hacía unos días el jugador ya estaba en la isla, había pasado el reconocimiento médico, pero faltaba la confirmación oficial.
Juan Carlos Cordero tuvo que lidiar con unas de las negociaciones más complicadas desde que ejerce como director deportivo blanquiazul, ya que clubes como el Eibar y el Granada se entrometieron con ofertas superiores, pero la voluntad del jugador de jugar en el Tenerife imperó sobre los cantos de sirena de clubes con más músculo económico.
Se trata de un futbolista que se adapta a distintas posiciones del ataque, si bien gran parte de lo que lleva de carrera lo ha hecho de segunda punta. El africano juega en ambas bandas, aunque la izquierda es su predilecta. También se desenvuelve como falso 9. Mo Dauda es un futbolista muy físico, y la velocidad es su mayor virtud. Tiene desborde, es eléctrico en el uno contra uno, y en el Cartagena destapó su faceta goleadora al anotar nueve tantos.
El nuevo futbolista del CD Tenerife ya se ejercitó con sus nuevos compañeros, y a las órdenes del entrenador tarraconense.
Primeras palabras
A falta de la presentación, Mo Dauda habló para los medios oficiales del club donde se mostró muy feliz de jugar en el representativo. “Estoy muy contento. Por eso estoy aquí, sino no estaría. Muy emocionado y no veo la hora de empezar. Cuando era niño solía ver los partidos de LaLiga. Solía seguir diferentes ligas, especialmente el fútbol español. Así que podía ver algunos de los partidos del Tenerife. Estoy muy emocionado y contento de estar aquí”, reiteró.
El atacante africano se dirigió a unos aficionados blanquiazules que lo han recibido con los brazos abiertos, como así demuestra los elogios que han profesado al quinto refuerzo isleño.
“En un equipo de fútbol, los fans también son parte de esto. En partidos complicados empujan al equipo con todo para que el equipo haga una gran actuación. Son parte del juego, adoro a los aficionados. Sobre todo cuando están en las buenas y en las malas. Tengo ganas de conocerlos”.
Dauda llega a la isla con el objetivo de aportar su granito de arena para que el equipo gane. “No estoy solo para jugar en una posición u otra. Estoy aquí para trabajar por el equipo. Haré lo que decida el entrenador. Si cree que puedo ocupar un puesto en el campo, estaré preparado y daré lo mejor. Lo principal es que el equipo gane”.
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