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Buzones para bebés en EE. UU.

La polémica alternativa al aborto de los estados conservadores
Buzones para bebés en EE. UU.

Después de que el Tribunal Supremo decidiera retirar la protección a la ley del aborto al dejar sin efecto la decisión de la histórica sentencia de Roe vs. Wade, algunos grupos conservadores proponen la expansión de las leyes de refugio seguro, Safe Haven Laws, que permiten a las mujeres entregar a los bebés con una interferencia mínima.


Estas leyes no son nuevas, pero su uso, si bien busca proporcionar una salida a los embarazos no deseados tras prohibir el aborto, plantean serios problemas.


Antes de que se pusiera fin al derecho al aborto en algunos estados, estos buzones de bebés, muy parecidos a los tornos donde se abandonaba a los bebés antiguamente, ya estaban disponibles para aquellas personas que quisieran entregar a un bebé anónimamente, pero durante años, en algunos casos ni siquiera se habían estrenado.

La alternativa propuesta


Los buzones para bebés son parte del movimiento de Safe Haven, que durante mucho tiempo ha estado estrechamente relacionado con el activismo contra el aborto. Según los defensores de esta práctica, su existencia evita que se haga daño a los recién nacidos, sean abandonados de forma insegura o incluso sean asesinados. Estos buzones permiten a los padres dar explicaciones, o incluso ser vistos cuando entregan a sus bebés. Por lo general, están situados en hospitales y estaciones de bomberos.


Los 50 estados de la Unión americana, tienen leyes de este tipo destinadas a proteger a las madres. La conocida como ley “Bebé Moisés”, fue aprobada en el estado de Texas en el año 1999, a raíz del abandono de varios recién nacidos en cubos de basura. La idea, nacida de la necesidad de otorgar protección a los menores ha ido ganando fuerza entre los sectores más conservadores, y especialmente religiosos, que prefiere la alternativa de la adopción al aborto.

En los últimos cinco años, más de una docena de estados han promulgado leyes que autorizan estos buzones o amplían las opciones de refugio seguro en otras modalidades. La Ley de refugio seguro de Indiana permite que cualquier persona entregue a su bebé de manera segura dentro de los 30 días posteriores al nacimiento, aunque depende de cada estado. En Dakota del Norte, por ejemplo, los bebés menores de un año pueden ser abandonados en un sitio de refugio seguro designado que incluye estaciones de policía, hospitales e incluso oficinas de servicios sociales. En Alabama, los padres solo tienen tres días y el bebé debe ser llevado a un hospital.

No son una panacea


Para llegar a esta situación, es posible que la madre haya ocultado el embarazo y dado a luz sin atención prenatal, o que sufran violencia de género, adicción a las drogas, falta de vivienda o enfermedad mental. Las adopciones en sí mismas también podrían ser problemáticas, ya que las mujeres posiblemente no sepan que están rescindiendo de sus derechos (desde que comenzó la operación, dos mujeres que dijeron que habían colocado a sus bebés en cajas han tratado de reclamar custodia de sus hijos.

Estos casos pueden tardar meses o incluso años en resolverse); y los niños se sean privados de información sobre sus orígenes. Además, no permite saber si el bebé fue entregado bajo coerción. Según los estudios más de la mitad de los niños que fueron depositados en estos buzones, presentan problemas de salud o de desarrollo, a menudo derivados de una atención prenatal inadecuada

Los “buzones”


Hay aproximadamente un centenar de estos buzones actualmente en Estados Unidos. Se trata de un buzón de metal que en su interior tiene una cuna de hospital con temperatura controlada. Una vez que el menor está dentro y el buzón se cierra, se bloquea en el exterior automáticamente y la persona que depositó al bebé no puede volver a abrirlo. En ese momento se activa una alarma y los miembros del personal de la instalación pueden acceder al bebé. El buzón también envía una llamada a los servicios de emergencia. Desde 2017 se han depositado 21 menores en estos buzones y el tiempo promedio que un niño está dentro de es menos de dos minutos.

La adopción tradicional


Según los estudios, en Estados Unidos, cuando la mayoría de las madres optan por no criar al niño, recurren con mayor frecuencia a la adopción tradicional, que les da a los padres biológicos control sobre la colocación del bebé y puede permitir una conexión a largo plazo con el niño a través de la adopción abierta. Aun así, los números en los Estados Unidos son relativamente bajos: en 2020, hubo aproximadamente 95.000 niños que fueron adoptados. Esta cifra incluye a los niños adoptados por familiares y padrastros. Mientras tanto, casi un millón de mujeres estadounidenses abortaron en 2020.

¿Evitarán los abortos?


Probablemente no. Sin la protección que brindó Roe v. Wade, las mujeres enfrentarán más desafíos para poder llevar a cabo el procedimiento: esto podría significar que las mujeres buscarán opciones más peligrosas, incluidos algunos métodos de aborto autoinducido.


Para aquellas mujeres que quieren un aborto y no pueden obtenerlo, en términos generales no recurrirán a estos Safe Haven o adopción tradicional. Si deciden tener el bebé, según datos del Estudio Turnaway, de la Universidad de California, la mayoría de las mujeres elegirán criar a los bebés ellas mismas, en muchos casos con consecuencias nefastas tanto para ellas como para el bebé.

El futuro del aborto en EE.UU.


La prohibición del aborto en Estados Unidos se aceleró esta semana con la entrada en vigor de cuatro leyes estatales que restringen el derecho en Idaho, Dakota del Norte, Tenesí y Texas. Si bien tres de esos estados ya tenían limitaciones significativas, las nuevas leyes permiten menos exenciones e imponen sanciones penales más severas.

Desde el jueves, el aborto se prohibió a partir de la concepción, con pocas excepciones, en doce de estados, y dos estados más prohíben el procedimiento después de la detección de actividad cardíaca fetal, alrededor de las seis semanas de gestación. Estas normas radicales podrían, además, dificultar el acceso de la mujer a la atención prenatal no relacionada con el aborto, incluso para un aborto espontáneo o planificación familiar.

En Texas, los proveedores de servicios de aborto a partir de ahora pueden ser sentenciados a cadena perpetua por realizar un aborto en cualquier momento durante el embarazo, a menos que la vida de la embarazada esté en peligro. En Tennesí, el aborto está prohibido excepto si es necesario para salvar la vida de la madre. En Idaho, están prohibidos los abortos con exenciones por violación, incesto y amenazas a la vida de la madre, y actualmente el estado está litigando contra la administración Biden en un tribunal federal sobre si los pacientes que están en riesgo de discapacidades graves pero que no amenazan la vida tienen el derecho al procedimiento.


En Dakota del Norte, todavía se está disputando en los tribunales la ley que entró en vigor este viernes.


El futuro del derecho al aborto es incierto en EE.UU., con la probabilidad cada vez más clara de que el acceso al aborto disminuirá en otros estados controlados por el partido conservador en los próximos meses.

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