El abandono de vehículos en el Sur, un viejo problema que aumenta con el paso del tiempo, preocupa cada vez más a los ayuntamientos de la comarca, que realizan constantes campañas para retirarlos de los espacios públicos y privados, conscientes de que las chatarras en calles y solares son focos de suciedad, representan un problema de seguridad y eliminan aparcamientos, además de afear el paisaje.
Una de las zonas más afectadas donde se aprecia con claridad este problema es el polígono industrial de Las Chafiras, en San Miguel de Abona, donde existen más de 200 coches abandonados, según los datos de la Policía Local. Otro medio centenar de unidades esperan a ser retiradas en el entorno de Guargacho, a pocos kilómetros.
“Hemos detectado que en los lugares próximos a los talleres de reparación se agrava el problema, se ven cada vez más casos, quizá por no poder pagar los arreglos”, manifestó a este periódico Antonio Manuel Rodríguez, concejal de Seguridad y Tráfico, que no se explica cómo tantos ciudadanos recurren a esta mala costumbre, “cuando la solución es tan sencilla como ir a la Policía Local y rellenar un formulario autorizando la retirada del vehículo sin coste alguno”. El edil se mostró agradecido por la colaboración ciudadana a la hora de informar al Ayuntamiento sobre los casos de abandono en las vías públicas.
arona
Arona ha llegado a acoger en su depósito municipal más de 400 coches inservibles retirados en la calle. Actualmente, la cifra ronda los 200. Cuando se detecta un vehículo con evidentes signos de abandono, como gomas en el suelo, cristales rotos o la ITV vencida desde hace tiempo, este se lleva al depósito y se inicia un expediente que se le notifica al propietario o se publica, en caso de no localizarlo.
Una vez que vence el plazo establecido, se haya notificado sin obtener respuesta o publicado sin reclamación, el vehículo se envía a un centro autorizado de tratamiento para su destrucción, un protocolo que aplican todos los ayuntamientos.
El concejal de Seguridad de Arona, Francisco Marichal, subrayó los “avances significativos” que se han producido en los últimos dos años y recomendó a los ciudadanos que se quieran deshacer de un automóvil que lo comuniquen al Ayuntamiento, antes de desprenderse de él en un espacio público. “Nosotros le facilitamos la solución, lo que permite al municipio ahorrar recursos y tiempo”, subrayó.
Granadilla
El Ayuntamiento de Granadilla de Abona emprendió el pasado 1 de agosto una campaña de retirada de vehículos abandonados, la tercera, después de deshacerse de “centenares” en las dos anteriores. La concejal de Seguridad, María Candelaria Rodríguez, indicó a este periódico que cada día se retiran una media de seis unidades. La edil, que pidió la colaboración ciudadana para comunicar los casos de abandono que se conozcan, insistió en que se ofrece la posibilidad de la entrega voluntaria para el tratamiento de la chatarra, previa declaración de residuo.
“Se pueden dirigir a las dependencias de la Policía Local, donde se facilitará y agilizará la cesión con la entrega de la documentación correspondiente”, explicó la concejal, que recordó que, una vez transcurrido el plazo legal, si el coche no se retira por su dueño, se declarará residuo sólido urbano y se le dará de baja, antes de enviarlo a un centro de tratamiento para su posterior destrucción y descontaminación.