Una potente borrasca en el Pacífico Sur, situada frente a la Antártida, podría convertirse en la más profunda que se ha registrado en la Tierra. Así lo ha confirmado este lunes en Twitter el divulgador Víctor González, quien asegura que este fenómeno meteorológico está haciendo historia.
González explica que la presión “es de unos 899 hPa”, un dato “inédito en una borrasca”. Asimismo, el divulgador apunta que el récord anterior se batió en 1993, en el Atlántico Norte, con una presión de 914 hPa, y sostiene que bajar de 900 hPa “es raro hasta en un huracán de categoría 5”.
Por su parte, la web especializada Meteored señala que en estos momentos se encuentra inmersa en un proceso de ciclogénesis “sobre aguas abiertas y zonas deshabitadas con registros de presión mínima de posible récord mundial del orden 898-900 hPa”.
Pero, ¿qué es una borrasca?
Según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), las borrascas se forman en regiones donde la presión atmosférica es más baja que la del aire circundante.
El aire fluye hacia el interior de las borrascas y asciende desde allí, lo que produce formación de nubosidad y precipitaciones. Las borrascas o depresiones también se conocen como ciclones, bajas presiones o, simplemente, bajas.
A escala sinóptica el aire circula en torno a una depresión en sentido antihorario en el hemisferio norte (en sentido contrario en el hemisferio sur). Este giro recibe el nombre de ciclónico. El proceso de formación de una borrasca se denomina ciclogénesis.