La Cafetería Verín, en la Calle Mejías de Santa Cruz de Tenerife, abrió sus puertas hace muchos años. Desde entonces y hasta ahora ha funcionado bastante bien, aunque desde agosto, que lo comenzaron a regentar Basilisa y su hijo Leiser, va aún mejor. Ellos han decidido mantener la esencia del local, ya que lo que funciona no se debe cambiar, y eso supone seguir teniendo unos precios imbatibles y una comida de calidad que se puede probar mientras lees DIARIO DE AVISOS a través de la nueva app, que permite la lectura del periódico por medio de un smartphone. Además, cuenta con una atención impecable.
La Cafetería Verín destaca, sobre todo, por sus exquisitas albóndigas caseras y por los bocadillos de calamares, aunque tienen una amplia oferta que va desde unas pulguitas, bocadillos, croissants, arepas y sándwiches exquisitos hasta unas deliciosas croquetas de serrano, pollo o pescado, comida típica canaria o su arroz a la cubana. Asimismo, cada día tienen una pulguita del día diferente. Así, los lunes son de tortilla cuatro quesos; los martes, de pata; los miércoles, de tortilla con chacina; los jueves, su famosa pulguita de calamares, y los viernes, de atún con pimiento asado.
Lo que más destaca de este local es el ámbito familiar que hay, ya que ha conseguido que los clientes se sientan como en casa gracias a la buena atención y a la norma que debe tener cualquier local de hostelería: el cliente es lo primero. Igualmente, el hecho de que su comida sea excelente y que tenga unos precios muy competitivos, no solo le ha servido a Basilisa y Leiser para mantener a su clientela tradicional, sino también para atraer a nuevos comensales hasta sus mesas.